Mascarillas quirúrgicas flotando en el agua, peces envueltos en plásticos o praderas de posidonia arrasadas son solo algunas de las escenas que los ganadores de la primera edición del certamen MARE han inmortalizado para denunciar el estado del mar balear, aunque también han revelado al mundo las maravillas que se esconden bajo estas aguas: increíbles especies marinas que dan forma y color a este espacio.

«En estos tiempos de incertidumbre, [este concurso] es una bocanada de aire fresco y de color que nos recuerda que tenemos un mar y una costa espectaculares», subrayó Sara García, coordinadora de la entidad, al tiempo que señaló que es hora de poner toda nuestra atención en respetar y proteger el mar balear, «un activo esencial para el futuro de Balears».

En total, el certamen audiovisual para la conservación del mar balear otorgó anoche dieciséis premios entre jóvenes y adultos, y que se corresponden con las categorías de fauna marina, mundo vegetal submarino, paisaje submarino, el mar desde fuera y la relación humana con el mar, así como tres menciones de honor al mejor mensaje de conservación, al retrato del estado/belleza y a la empatía.

El jurado, formado por los fotógrafos Ángel Fitor, Meaghan Ogilvie y Ofelia de Pablo, alabó la gran calidad de las imágenes presentadas, destacando el primer premio en fauna marina, de Marcos Darío, a la que calificaron de «inusual, única e impresionante». «Existen muchas imágenes de cabrachos, pero ninguna con esta mirada, con mucha personalidad, en una composición llena de belleza», comentaron. También las fotografías de mascarillas sanitarias saltaron a debate, llevándose varios galardones por «mostrarlas como si fueran una nueva especie marina».

Casi mil entradas (883 fotografías, seis vídeos y tres reportajes con 36 imágenes) y120 participantes (103 adultos y 17 jóvenes) culminan esta primera edición. «Es muy importante contagiar el amor y curiosidad por lo que se esconde debajo del agua. Todavía hay muchas personas que no son conscientes de la gran riqueza y biodiversidad que alberga el mar balear», concluyó la oceanóloga Gádor Muntaner.