Martí March respondió ayer a la polémica que suscitó hace varios días una carta que la conselleria de Educación envió a los profesores, en la que se les pedía que limitaran su actividad social. Muchos educadores se mostraron contrariados por el contenido de la misiva que habían recibido. El conseller explicó que la única razón de esta carta era pedir a los profesores que «actuaran con prudencia» y que realizaran un esfuerzo conjunto para controlar el coronavirus. March detalló que esta carta «no iba en contra de los profesores, ni tampoco se pretendía provocar un malestar. Si alguien se ha sentido enfadado por esta carta, desde aquí le pido disculpas», señaló.

Sin embargo, recordó que la pandemia obliga a toda la población a tener una actuación solidaria, ya que de lo contrario no se podrá terminar con esta situación sanitaria. Por esta razón, insistió en que toda la población debe realizar un esfuerzo especial para colaborar en el control del virus. El conseller insistió en que el mismo mensaje que envió a los profesores, lo lanzó también a las familias, para que realizaran un esfuerzo para cumplir las recomendaciones sanitarias.

También destacó que de momento no se han producido muchos contagios en los colegios. Los alumnos que se han contagiado representan un porcentaje menor y los colegios han podido resolver estos incidentes.

March explicó ayer que la conselleria que dirige no tiene previsto realizar unas pruebas masivas de PCR a todos los profesores de los centros públicos y concertados de Balears. Explicó que esta decisión ha sido acordada con la conselleria de Sanitat, con la que mantiene una colaboración directa. Y justificó esta decisión en que el hecho de que un profesor de negativo en uno de estas pruebas, no supone que al día siguiente pueda estar contagiado. Sin embargo, recordó que se realizaron al inicio de curso más de 1.300 pruebas serológicas a los profesores que se encuentran en el grupo de riesgo.

El conseller insistió ayer que dentro de los colegios es complicado que se puedan producir contagios, con las medidas que se han adoptado. Los alumnos se contagiarán fuera de los colegios. Cuando se detecte un caso positivo, siempre dentro de las recomendaciones que marquen los expertos sanitarios, se realizarán test de PCR al alumno, a sus compañeros y al profesor que ha mantenido más contacto con este positivo.

Por otra parte, el responsable de la política educativa del Govern señaló que no era partidario de que en estos momentos se produzcan cambios sobre los horarios que realizan los colegios concertados, debido a la dificultad que supondría. Sin embargo, aclaró que se trata de una decisión de los propios colegios.