Ayer empezó la vuelta al ‘cole’ más larga de la historia (durará diez días ya que la incorporación es progresiva) y que llega después de uno de los periodos más largos en los que las escuelas han estado sin desarrollar su actividad normal. La ilusión se mezcló con la responsabilidad y con la preocupación, de fondo pero constante, de saber que sí o sí habrá contagios y brotes en los colegios e institutos. Solo queda “esperar a que el virus entre en los centros” y ver de qué magnitud de incidencia hablamos y cómo se gestiona.
El primer día transcurrió sin incidencias muy destacables, excepto para el CEIP Santa Gertrudis de Eivissa, que no pudo abrir al tener una gran parte del profesorado en cuarentena tras un positivo y que iniciará su actividad hoy. Otros centros (como el CEIP Sa Indioteria o el Juande la Cierva) han tenido que afrontar el inicio escolar con ya algún docente confirmado (Educación dijo tener constancia ayer de cinco docentes contagiados) y varios en aislamiento. La Conselleria sabe que cubrir rápidamente este goteo de bajas (que se incrementará al arrancar la actividad lectiva) será uno de los retos del curso y por eso planteará hoy a los sindicatos la creación de una equipo especial de interinos para sustituciones.
Lo ha dicho la presidenta Armengol, lo ha dicho el conseller Martí March, lo ha dicho el experto en enfermedades infecciosas Javier Arranz y así lo asumen los directores: “En algún momento habrá casos en centros y habrá confinamientos de aulas, cursos... es inevitable”, indicaba ayer Joana Maria Mas, presidenta de la Asociación de Directores de Primaria ADIPMA. “No sabemos cuándo, pero el virus entrará en los centros”, se resignaba el homólogo de Mas en Secundaria, Joan Ramon Xamena.
Con esa posibilidad presente, la vida lectiva arranca. Ambos directores señalaron que el día de ayer transcurrió con tranquilidad dentro de todo. Valoraron que alumnos y familias respetaron las normas. Xamena señala que ahora el reto para ellos es acabar de configurar y ver cómo funciona la combinación de enseñanza presencial y a distancia: “Es algo totalmente nuevo”.
Tanto Armengol como March agradecieron ayer a los equipos directivos y a los docentes el esfuerzo hecho y dijeron comprender “las dudas y la angustia” que siente la comunidad educativa, pero insistieron en que era necesario abrir las escuelas y que éstas son entornos seguros. El conseller tachó este periodo escolar de “curso de transición” y se mostró convencido de que los alumnos “aprenderán”.
Además de las bajas por positivos y cuarentenas, alrededor de 300 profesores están en incapacidad temporal por ser perfil de riesgo ante el coronavirus. Ayer March dijo desconocer todavía cómo han ido los resultados de las pruebas serológicas que se ofrecieron a 1.300 docentes vulnerables. A los que den positivo se les hará una PCR.
Casi 155.000 alumnos
La vuelta al ‘cole’ se prolongará este año hasta el día 23 de septiembre, cuando en teoría ya se habrán incorporado casi 155.000 estudiantes desde Infantil a Bachillerato. Cada día se suman a las aulas unos 150 alumnos por centro.
En cuanto a profesorado, un total de 16.340 docentes trabajarán en el sistema educativo este curso. Son 560 más que el pasado, pero eso no ha impedido que niños con necesidades hayan quedado sin profesores de apoyo ya que éstos han tenido que ponerse al frente de una clase para poder desdoblar grupos y reducir ratios (que son según March de máximo 20 en pública y “algo más” en concertada). El conseller aseguró ayer que estudiarán los casos denunciados y si es necesario plantearán “una reorganización de los recursos”.
“Queremos pensar que los contagios serán la excepción, pero la lógica apunta a que no será así”.
Los sindicatos docentes de la red pública no coincideron respecto a la conveniencia de organizar movilizaciones (solo UOB se ha decidido: hoy realiza una concentración frente a la sede de Educación y no desiste de convocar una jornada de huelga, aunque la ha pospuesto del día 14 al 29), pero sí se unieron para solicitar un retraso del inicio escolar, apoyándose en la postura del Sindicato Médico y el Colegio de Médicos.
Cosme Orell, del STEI, se mostró preocupado ante la evolución del curso: “Queremos pensar que los contagios serán la excepción, pero la lógica apunta a que no será así”. Alternativa Docent lamentó que pese a las “advertencias”, el Govern haya decidido arrancar el periodo escolar “con normas contradictorias”. El sindicato finalizó su comunicado con una expresión muy oída estos días en el sector: “Mucha suerte a todos”.
LAS CLAVES
-Diez días de vuelta al ‘cole’
El 23 de septiembre se habrán incorporado al curso casi 155.000 niños de Infantil a Bachillerato.
-Pocas incidencias
Problemas con algunos servicios de transporte escolar, falta de material y un colegio de Eivissa que no pudo abrir por tener muchos profesores en aislamiento, entre los principales problemas del día.
-Preocupación a las bajas
Educación planteará hoy a los sindicatos fórmulas para lograr que las sustituciones se cubran rápido. Es una de las principales preocupaciones de los centros.
Mascarillas Quejas por las protecciones para docentes
Entre las toneladas de equipamiento que Educación ha enviado a las escuelas para el primer trimestre, se encuentran cuatro mascarillas reutilizables para cada profesor. En algún centro, como el IES Josep Maria Llompart, se ha constatado que las protecciones faciales que les han enviado no bastan para todo su profesorado. Por otro lado, varios profesores han puesto en entredicho la calidad de las mascarillas: “Son casi transparentes de finas que son”, lamentan algunos docentes, que incluso se cuestionan que estén homologadas, algo que Educación garantiza.
