La noche de Magaluf (MagalufCalvià dio sus primeras señales de vida este verano tras la llegada de turistas británicos, dejando escenas poco edificantes como las que mostraron unas imágenes en que se veía a un reducido grupo dando saltos encima de un coche aparcado en la vía pública. La concentración se produjo en torno a las dos de la mañana del pasado jueves, coincidiendo con el cierre de los locales.

Unas escenas que el ayuntamiento de Calvià, gobernado por PSOE y Podemos-Més, quiere cortar de raíz en este verano marcado por la crisis del coronavirus. En este sentido, el gobierno municipal lanzó ayer el mensaje de que no hay ninguna excusa para flexibilizar la persecución de los turistas incívicos, en estos tiempos de drástica reducción en la llegada de visitantes.

"Por supuesto que nosotros queremos que vengan turistas, pero no para hacer esos desmanes. Queremos turistas que disfruten del ocio nocturno, sí, pero no de un parque temático del alcohol", sostuvo Nati Francés, la primera teniente de alcalde de Calvià, delegada de Cohesión Social, Igualdad, Comunicación y Policía Local, quien enfatizó que el decreto autonómico contra el turismo de excesos "se va a aplicar en todas sus medidas".

En alusión a lo sucedido en Magaluf, Francés explicó: "Esas imágenes nos preocupan, porque hablan de irresponsabilidad en un momento como el actual. Pero fue algo puntual, y yo lo acotaría ahí. No son las imágenes de otros veranos y ni siquiera de lo que pasó el día después".

La representante municipal recordó el trabajo realizado en los últimos meses para actuar contra los desmanes, entre los que mencionó la modificación de ordenanzas y el refuerzo de la coordinación policial. Agregó que el Consistorio ha remitido al Ejecutivo autonómico hasta una treintena de denuncias por infracciones al decreto contra los excesos, relativas, por ejemplo, a fiestas en barcos ( party boats) y a publicidad de bebidas alcohólicas.

Refuerzo policial

Igualmente, la Policía Local ha reforzado su vigilancia en la zona desde este fin de semana, lo que ha dejado como balance la denuncia a tres establecimientos por incumplir con los horarios y la detención de un dj de un local por tráfico de drogas.

Además, en la madrugada del sábado al domingo se levantaron actas a sendos establecimientos de Punta Ballena y Peguera por vulnerar las ordenanzas, mientras que en la madrugada del lunes fueron detenidos tres turistas por agredir a un comerciante de esa calle de Magaluf, según informó la Policía.

En todo caso, el Ayuntamiento de Calvià advierte de que no sólo pone el foco en el comportamiento de los turistas, sino también en el de los residentes.

En estos primeros compases del verano marcado por la pandemia, se han producido aglomeraciones en varias playas del municipio (especialmente, en las más cercanas a Palma) que han obligado a cerrar el acceso. Sin ir más lejos, el pasado sábado los agentes tuvieron que actuar en Buguenvíl·lia, Cala Comtessa, Illetes.

La Policía, además, tuvo que clausurar este mes una fiesta ilegal en Costa de la Calma, donde había un centenar de personas.

En referencia a estos episodios, la teniente de alcalde de Policía hizo un llamamiento a la concienciación ciudadana. "Yo quiero apelar a la responsabilidad individual, grupal y empresarial. Los residentes también tenemos que enseñar con el ejemplo, porque nos jugamos mucho", manifestó. Francés subrayó que, en el caso del colapso de arenales, los puntos más afectados son los que están más cerca de Palma.

"Animo a todos esos bañistas a que visiten todos nuestros arenales, también los más grandes, como Palmanova, PalmanovaSanta Ponça, dijo.