Una de las prioridades ha sido que el mayor número posible de trabajadores salgan de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) para que puedan cobrar un sueldo y dejar de depender de las prestaciones por paro en plena temporada turística. Para ello, Govern y agentes sociales de las islas han conseguido que el Ejecutivo de Pedro Sánchez aprobara ayer una bonificación del 50% en las cuotas a la Seguridad Social para todos aquellos fijos discontinuos que salgan de esos ERTE y se reincorporen a sus puestos de trabajo durante los meses de julio, agosto, septiembre y octubre. Se trata, en definitiva, de que al empresario le salga más beneficioso tener a sus empleados trabajando que en el paro.

La medida, aprobada por el Consejo de Ministros celebrado ayer, va dirigida a las empresas con una mayor dependencia del turismo, es decir, las enmarcadas en los sectores de la hotelería, la restauración, el comercio o el transporte discrecional, por citar algunos ejemplos, lo que evidencia el fuerte impacto que puede tener para Balears. Teniendo en cuenta que esta nueva bonificación del 50% para los fijos discontinuos se suma a las exenciones que ya se venían aplicando hasta septiembre, del 60% para las empresas de menos de 50 trabajadores y del 40% para las que alcanzan esa cifra o la superan, el resultado es que un empresario que saque del ERTE a uno de estos empleados se puede encontrar con que solo le va a tener que abonar su salario, dado que las cotizaciones a la Seguridad Social prácticamente quedan reducidas a la nada.

Esta medida acordada con Madrid y aprobada ayer, fue comunicada por la presidenta balear Francina Armengol, y los consellers de Trabajo y de Hacienda, Iago Negueruela y Rosario Sánchez respectivamente, a los presidentes de las patronales CAEB y PIMEB, Carmen Planas y Jordi Mora, y a los secretarios generales de UGT y de CCOO en las islas, Alejandro Texías y José Luis Sánchez. Tras esta reunión de la Mesa del Diálogo Social, los representantes de empresarios y trabajadores no ocultaron su satisfacción ante esta ayuda.

¿Qué supone esa bonificación? Como se ha dicho, que sumada a las exenciones antes señaladas, las empresas turísticas prácticamente no van a tener que abonar nada por las cuotas a la Seguridad Social. Es decir, van a "tener que hacer números", en palabras de Jordi Mora, para ver si les beneficia más tener que pagar las cotizaciones a la Seguridad Social por un fijo discontinuo que estando en el ERTE no produce ningún ingreso, o si por el contrario se aprovechan de esa medida y prefieren recuperarlo y pagar solo el sueldo del empleado pero que éste les genere ingresos. Según matizó el conseller Negueruela, se trata de conseguir que se pierda menos dinero abriendo que teniendo en negocio cerrado, en el marco de la dura crisis generada por el coronavirus.

La opinión de los representantes empresariales y sindicales fue clara: muchas empresas van a optar por recuperar su actividad y a sus trabajadores gracias a estos incentivos. Esta misma postura fue posteriormente expuesta desde la federación hotelera de Mallorca y desde la asociación balear de cadenas de alojamiento.

La prioridad balear

Iago Negueruela subrayó que la prioridad del Govern balear en sus negociaciones con Madrid, a diferencia de otros intereses como los canarios, ha sido obtener incentivos para que las empresas turísticas retomen su actividad entre los meses de julio y octubre, es decir, durante la temporada alta, al asumir que a partir de noviembre y diciembre es muy difícil que éstas puedan estar operativas. De este modo se consigue también que un mayor número de trabajadores recuperen sus salarios y dejen de depender de las prestaciones por desempleo, al ser los primeros más altos, y ayudar a que así las familias mejores sus ingresos para luego poder hacer frente al parón invernal y a la espera de que se reactive la temporada de 2021.

La importancia de este último punto, según el conseller, se refleja en que Balears cuenta con más de 78.000 fijos discontinuos (52.800 en Mallorca) y que dos de cada tres afectados por ERTE en las islas corresponden a este tipo de empleados. Si se lograra que todos recuperaran la actividad en verano, la medida aprobada ayer supondría para las empresas del archipiélago un ahorro en cotizaciones cifrado en unos 60 millones de euros.

Además, en el caso de salir todos del ERTE y recuperar su salario en lugar de la prestación implicaría para las familias de las islas elevar sus ingresos en unos 145 millones de euros. O lo que es lo mismo, un próximo invierno menos duro.

Carmen Planas y Jordi Mora reconocieron su satisfacción ante esta iniciativa y felicitaron al Govern por la negociación que ha mantenido con el Ejecutivo estatal para obtenerla. Sin embargo, la primera no ocultó que hoy por hoy se estima que solo se podrá recuperar entre el 30% o el 40% de la actividad turística habitual de veranos anteriores, aunque señaló también la mejoría que se va registrando día a día en las reservas. Por ello, consideró que es fundamental reforzar la conectividad aérea y abaratar el precio de los billetes de avión.

Mora defendió la ayuda obtenida de Madrid en primer lugar por el elevado número de trabajadores que pueden ver su salida de los ERTE, en segundo porque se puede sumar a las exenciones ya existentes, y en tercero porque se mantendrá hasta octubre, lo que supone un importante estímulos para que los empresarios "valientes" vuelvan a abrir.

Por su parte, Alejandro Texías y José Luis García pusieron en valor que se impulse la recuperación de la actividad y especialmente de las retribuciones habituales para los trabajadores del archipiélago.

Satisfacción de los hoteleros

Posteriormente, los presidentes de la federación hotelera de Mallorca y de la asociación de cadenas, María Frontera y Gabriel Llobera, se sumaron a esas valoraciones en positivo por cuanto se impulsará la actividad en temporada alta, pese a asumir que este año no todos los negocios van a poder reabrir.

El conseller Negueruela informó además de que el lunes mantendrá una reunión con las patronales de los sectores que se van a beneficiar, como el transporte discrecional, para que éstos opten por sacar de sus ERTE al mayor número posible de sus trabajadores.

Desde el ministerio de Trabajo se destacó que, de este modo, se da un paso más en la protección de los fijos discontinuos.