No hay aprobado general pero dado que la instrucción es que la repetición se debe limitar a casos muy excepcionales, la conselleria de Educación pide a los profesores "flexibilidad" al evaluar a los estudiantes para "favorecer" que no acumulen las materias suspendidas que en condiciones normales supondrían repetir el curso.

El conseller Martí March ha señalado hoy en rueda de prensa que no descartan hacer unas instrucciones más precisas sobre este aspecto.

En ESO, donde la tasa de repetición es más alta, un alumno no puede pasar de curso con dos asignaturas suspendidas si coinciden que éstas son Matemáticas y una de las dos lenguas cooficiales, Lengua Catalana o Lengua Castellana (las asignaturas instrumentales). Si son otras materias, sí se pasa de curso. Con tres suspensos se puede promocionar de curso si no son las asignaturas instrumentales. Con cuatro materias se repite sí o sí. En Bachillerato es necesario aprobar todas las materias para titular. En Primaria, se repite también si se supenden dos materias instrumentales o tres asignaturas, incluyendo una de las instrumentales.

"Hay que intentar la máxima promoción", ha reiterado el responsable autonómico de Educación, "el objetivo es que nadie pierda el curso", ha apuntado, argumentando que se han tomado estas resoluciones pensando en la equidad y la función social de la escuela como compensadora de desigualdades.

El conseller ha señalado que la repetición, ya en condiciones normales, "no es útil ni personal ni pedagógicamente" y que por eso desde su departamento se ha intentado en los últimos años buscar medidas alternativas. Los porcentajes de repetición de las islas han bajado, pero siguen siendo de los más altos de España. En el contexto actual, March ha instado a aplicar "procesos individualizados de evaluación".

Según lo anunciado ayer por el ministerio de Educación, cada repetición que se plantee deberá ir acompañada de un "preciso informe" personalizado y una "argumentación sólida" y cada caso deberá ser autorizado por la conselleria. Las instrucciones de Educación para Primaria insisten y acotan aún más esa excepcionalidad de la repetición de curso, una medida que será "muy restringida" en este curso.

Para este último trimestre, las instrucciones de Educación para todos los ciclos educativos es que se "priorice" el contenido y se "flexibilicen los criterios de evaluación", centrándose en lo que los departamentos consideren "esencial" y adaptando la programación a aquellos alumnos que tengan dificultades para seguir la enseñanza telemática. Lo hecho estas semanas por los alumnos desde casa solo contará para subir nota y el alumno no podrá cerrar el curso con una calificación inferior a la que tenía antes de la suspensión de las clases. Los que tengan asignaturas suspendidas podrán recuperarlas este último trimestre con trabajos o exámenes 'telemáticos'.

A los alumnos de ESO y Bachillerato que cierren el curso con materias suspendidas se les realizará un plan de refuerzo individual según sus circunstancias personales y tendrán exámenes presenciales de recuperación en septiembre (pruebas en las que solo se les podrá preguntar por el contenido impartido antes de la suspensión de las clases).

El contenido y las competencias que hayan quedado pendientes se impartirán a lo largo del primer trimestre del próximo curso, en el que también se habilitarán planes de refuerzo (como el Plan de Acompañamiento Escolar ya existente o el PROA, que desapareció en 2012 víctima de los recortes presupuestarios).

¿Se contratarán más profesores para realizar estos planes? El conseller March ha indicado que aún no lo pueden decir ya que todavía están planificando el próximo curso y la cuota de profesorado. Ha mencionado que podría seguirse la metodología del Plan de Acompañamiento Escolar (PAE) que imparten profesores de los centros que se presentan voluntarios, fuera del horario escolar y cobrando un plus por ello. Martí March ha indicado que para decidir este punto y si se contratan a más profesores "habrá que tener en cuenta la situación de dinero público" con la que se encontrará Balears como consecuencia de la pandemia.

Tras el anuncio de ayer del ministerio de Educación de que la promoción y titulación automática (salvo casos muy excepcionales) y que lo hecho en casa solo servirá para subir nota, algunos docentes han expresado sus dudas sobre cómo harán para mantener la motivación del estudiante para seguir trabajando lo que queda de curso. Preguntado por esta cuestión, el conseller ha contestado que "ojalá" tuviera la respuesta exacta, pero ha recordado que no hay aprobado general con lo que "hay que mantener la ilusión y las ganas de trabajar" y ha destacado la importancia de "mantener las rutinas" así como el contacto con los estudiantes, también por una cuestión de emocional y para conocer la situación de cada familia.

Como ya se dijo ayer, March ha repetido que el curso acabará en las fechas que estaban previstas y que no se alargará (al margen del desconfinamiento y de si los alumnos llegan a reincorporarse presencialmente a las aulas o no, algo que, ha insistido el conseller, decidirá Sanidad). Solo se modifica el calendario de 2º de Bachillerato, que acabarán el 19 de junio para poder llegar a tiempo y realizar la Selectividad los días 7, 8 y 9 de julio, como se ha pactado con la UIB. Sobre el acceso a la universdad, el conseller ha indicado que no se modificará la manera de calcular la nota de acceso, que se calcula a partir del 60% de la calificación de Bachillerato y el 40% de la de la Selectividad.

En verano no habrá clases, pero Educación estudia cómo abrir los centros para actividades socioeducativas. Por un lado, estudia abrir colegios en colaboración con ayuntamientos y entidades para que los alumnos más pequeños (Infantil y Primaria) puedan realizar allí actividades ocio y deporte. También se estudia abrir los centros para que los alumnos de ESO acudan a sesiones de refuerzo, una opción que en cualquier caso sería voluntaria. Todo, ha razonado March, dependerá de las condiciones sanitarias que se fijen respecto a ratios y espacios mínimos necesarios.

En cuanto a los centros de educación infantil autorizados (las 'escoletes'), que tienen un calendario y horario diferenciado al cumplir una función educativa pero también de conciliación, el conseller ha señalado que abrirán según lo determinen las autoridades sanitarias. Ha señalado que en otros países se han ido abriendo de forma progresiva, con la incorporación progresiva de los críos según la edad y teniendo en cuenta los espacios disponbiles.