Uno de los proyectos estrella de la UIB que también tendrá que esperar es la ampliación de la residencia de estudiantes. Francisca Mas, presidenta del Consell Social de la Universitat, alertó de la situación que se está creando: "Alumnos se pueden quedar sin poder estudiar por falta de vivienda en Palma y al tener la residencia de estudiantes al completo. Sería una situación del todo discriminatoria".

En estos momentos la residencia de la UIB cuenta con 100 plazas y hay 180 estudiantes en lista de espera para entrar. Hace unos años incluso tenían las instalaciones medio vacías, pero en los últimos cursos se ha disparado la demanda. Han coincidido el incremento del precio de la vivienda, la proliferación del alquiler turístico y la implantación de la Facultad de Medicina, ya que la mitad de los alumnos son de otras comunidades.

Francisca Mas, Maria Llompart y Antònia Fullana coincidieron ayer en explicar que la ampliación de la residencia, en otras cien plazas, es una de las urgencias con las que cuenta la UIB. Existen terrenos en el mismo campus universitario para su construcción y el Govern está por la labor, pero falta la financiación.

Mientras llega esta obra importante, Francisca Mas pidió que se habiliten fórmulas alternativas para evitar que alumnos se quedan sin estudiar al no poder pagar una vivienda en Palma o no tener plaza en la residencia de estudiantes. Entre las posibilidades que apuntó Mas está la de que estudiantes convivan con personas mayores a cambio de compañía. Es una fórmula que ha funcionado en otras universidades.

Por otra parte, la inversión por estudiante ha aumentado un 0,75%, llegando a 5.490 euros. No obstante, esta cantidad es 700 euros más baja que la media estatal.