La Guardia Civil ha rendido este martes, junto a autoridades, partidos y ciudadanos, un sentido homenaje en la localidad turística de Palmanova, homenaje en la localidad turística de Palmanova, en Mallorca, a las dos últimas personas asesinadas por ETA en España, los guardias civiles Carlos Sáenz de Tejada y Diego Salvá.

El acto ha tenido lugar en el mismo lugar donde hace diez años estalló una bomba lapa en el coche patrulla al que subieron y que terminó con la vida de estos guardias civiles de 28 y 27 años, respectivamente, y que apenas llevaban un año de servicio en el cuerpo.

Esta calle lleva hoy el nombre de Diego Salvá Lezaun, cuyos padres y algunos de sus hermanos han seguido emocionados este acto al que han asistido la presidente de las Islas Baleares, Francina Armengol, el alcalde de Calvià, Alfonso Rodríguez, el delagado del Gobierno en Baleares en funciones, Ramon Morey, y todos los altos mandos militares de Baleares, entre otras autoridades. También estaban presentes cuerpos policiales procedentes de Francia e Italia.

Al inicio del acto, el coronel jefe de la Guardia Civil en Baleares, Alejandro Hernández, ha querido subrayar que este "especial homenaje de la crudeza de un atentado" ha sido organizado en recuerdo de Carlos y Diego, pero también de los 214 guardias civiles que fueron asesinados por ETA y de las más de 850 personas que perdieron su vida por las actuaciones de la banda terrorista que, finalmente, fue "derrotada". El coronel ha recitado también un fragmento del poema Elegía, de Miguel Hernández, que hace referencia al dolor ante la pérdida de los seres queridos. Además, la Guardia Civil ha entonado su himno y la canción La muerte no es el final.

Armengol ha subrayado que "como presidenta he querido estar en el homenaje sentido a dos civiles asesinados hace ahora 10 años". La presidenta ha lamentado también que son "fue una tragedia que nos destrozó anímicamente a todos", aunque declaró que la noticia positiva "es que se ha terminado con el terrorismo de ETA". Por su parte, el alcalde de la localidad se ha situado en la misma línea: "Calvià recuerda perfectamente ese día, evidentemente fue una sacudida para todos". Rodríguez ha recordado a los dos guardias civiles pidiendo que "estén en la memoria de Calvià y de la sociedad balear, que reconoce el esfuerzo de la Guardia Civil y la barbarie de ese terror".

En cuanto a la búsqueda de los culpables del atentado, Ramón Morey ha afirmando que "los cuerpos de seguridad del estado nunca dejarán de investigar para esclarecer qué pasó ese día y llevar a los culpables ante la justicia, es la mejor manera para cerrar esta herida". En referencia a esto, el coronel jefe del cuerpo de seguridad ha asegurado que tanto las unidades de información de Baleares como la unidad central de terrorismo "siguen investigando el hecho, no cesaremos hasta que no encontremos a los asesinos". El padre de una de las víctimas y miembro de Vox, Antonio Salvà, ha agradecido "muchísimo" el homenaje, y ha pedido que "el Tribunal Supremo nos dé la razón y que este tipo de atentados no prescriban nunca"

Ya por último, el líder del PP en las islas, Biel Company, ha lamentado que hoy se haga un homenaje a las víctimas "mientras en País Vasco se haga lo mismo con los etarras que salen de las cárceles". Además, ha lanzado un dardo al PSOE: "es un mensaje al PSOE, que no tiene reparo en pactar con los herederos de ETA en Navarra. Los partidos constitucionalistas tienen que estar del lado de las víctimas".

En el homenaje se han hecho múltiples ofrendas florales. Primeramente, Armengol y el alcalde de Calvià, también de los familiares, compañeros de la Guardia Civil, Vox Baleares, asociaciones monárquicas, la Asociación de Hoteleros de Magaluf o el consolado de los Estados Unidos, entre otras.