Hoy declaran como testigos los periodistas Kiko Mestre y Blanca Pou, que cubrían el caso Cursach.

Mestre y Pou explicarán a la instructora cómo fueron abordados, en la mañana del pasado 11 de diciembre, por la Policía y una secretaria judicial para notificarles los autos de Florit ordenando la requisa de sus móviles y otros dispositivos electrónicos de trabajo y personales y el registro de sus redacciones. También hoy está previsto que declare un inspector de Policía que pidió a Florit la requisa de los móviles.