El último discurso de fin de año de esta legislatura pronunciado por la presidenta Francina Armengol fue recibido con duras críticas del PP y Cs,mientras que la tercera pata del Pacto con PSIB y Més, Podemos, lanzó un respaldo global aunque con matices. El Pi, aunque no arremetió contra Armengol, también dejó clara su decepción con un discurso con el que la presidenta contó con el respaldo de su partido y sus socios de Més.

El líder del PP balear, Biel Company, calificó el discurso de "triste y apagado, fruto de que en 2018 Armengol lo ha pasado mal, sobre todo desde que Pedro Sánchez llegó a la presidencia del Gobierno". Para Company, "tras cuatro años de legislatura el postureo se ha trasladado a la nada que Armengol puede ofrecer a la sociedad" y su discurso refleja que "estamos ante una presidenta acabada".

El portavoz balear de Cs, Xavier Pericay, tildó el discurso de "engolado, autosatisfecho y de escaparate". Pericay resumió la intervención de la presidenta en dos partes: "Un recuerdo parcial e interesado de las políticas de su Govern y la repetición las mismas promesas de siempre". Añadió que estas promesas que Armengol "siempre califica como sueños, son exactamente eso, sueños".

El líder de El Pi, Jaume Font, tampoco se mostró especialmente satisfecho. Para Font, "no es el discurso que a Armengol le hubiera gustado hacer para el final de la legislatura", algo que a su juicio queda claro cuando se compara "el ímpetu con el que hablaba del REB y de la financiación en 2015 y sus afirmaciones ahora de que seguirá luchando para conseguirlo".

Incluso la tercera pata del Pacto, Podemos, detectó "importantes ausencias" en el discurso de la presidenta. La secretaria general del partido, Mae de la Concha, consideró que debería haber incidido más en "las necesidades de la población o los recursos de las islas" y, al igual que Font, resaltó "el problema de la movilidad, que está sin solucionar". A pesar de estos vacíos, De la Concha afirmó que globalmente el discurso le pareció positivo, en especial en lo que se refiere al Estado del Bienestar.

PSIB y Més sí dejaron claro su respaldo a la intervención de Armengol. Guillem Balboa, coordinador de Més, consideró que "ha sido un discurso de un Govern plural y sobre todo consciente de que queda mucho trabajo por hacer y de la voluntad de continuar" al frente del Govern. Para Iago Negueruela, portavoz del PSIB, "el discurso corrobora que tenemos una presidenta conocedora y consciente de los problemas de cada isla y perfectamente capaz de darles solución con un proyecto a largo plazo que debe consolidarse y continuar impulsando en la próxima legislatura".