Las aproximadamente 2.000 plazas solicitadas en una semana para alquiler vacacional, cifra que ayer desveló DIARIO de MALLORCA, corresponden a unas 400 peticiones, lo que supone una media de unas 5 plazas por solicitud, según los datos de los que dispone este periódico.

Para hacerse una idea del interés en lograr plazas para el arrendamiento turístico, un ayuntamiento como el de Alcúdia ha expedido hasta ahora 300 certificados municipales para tramitar después las solicitudes de compra de plazas en la conselleria de Turismo.

La vicepresidenta del Govern y consellera de Turismo, Bel Busquets, afirmó ayer que aún no disponen de cifras cerradas sobre el proceso que se abrió el 30 de julio para pedir los permisos, por lo que no quiso aventurar una previsión respecto a cuántas se solicitarán ni si se agotará la bolsa de 20.000 plazas para alquiler turístico y 10.000 más hoteleras.

Turismo prevé disponer de datos oficiales sobre el número de solicitudes la próxima semana. Busquets resaltó que en la primera semana para legalizar y comprar nuevas plazas turísticas "no se han producido aglomeraciones en ningún momento y mucha gente lo que pide es información", por lo que el proceso para tramitar la documentación necesaria para comercializar las viviendas se desarrolla con "plena normalidad"

Recordó que para comercializar las viviendas se necesitan trámites con el ayuntamiento en el que se ubique el inmueble, por lo que en muchos casos los interesados han acudido a la sede de la Conselleria para obtener la documentación e información necesaria.

El precio para comprar una plaza de alquiler turístico en pisos todo el año será de 875 euros y las plazas para alquiler vacacional en la vivienda habitual durante dos meses costarán 291,67 euros.