La Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos (FAPA) ha expresado hoy su alarma y preocupación tras lo sucedido ayer en unas fiestas de Establiment, que acabaron con ocho menores de entre 12 y 14 años atendidos por intoxicación etílica.

La entidad ha señalado que esta noticia se ha hecho pública coincidendo con el Birracrucis en Inca, una festividad que ya han criticado varias veces al entender que normaliza el consumo de alcohol en la vía pública y en horario matinal, lanzando un mal mensaje a los menores.

La FAPA hace tiempo que trabaja activamente para prevenir el consumo de alcohol por parte de menores, a través del programa FERYA y buscando potenciar "el trabajo en red y de concienciación", apelando a la "responsabilidad compartida y a la necesidad de asumir este asunto como "un problema de todos". En un comunicado remitido esta mañana recuerdan que esta problemática no es fruto de un "solo factor" y requerirá varias acciones coordinadas.

"Los efectos del consumo, que afectan a la ciudadanía, como los ruidos, la suciedad o el incivismo son graves y obviamente se han de sancionar", argumenta la Federación, "pero haciendo solo esto no se soluciona el problema, sino que normalmente lo único que se conseguirá es cambiarlo de lugar, tanto sea de barrio dentro de una misma ciudad o de pueblo dentro de nuestra isla".