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David Abril no ha cambiado de partido, pese a que ya luzca corbata.

Extraoficial

Los calores de Xelo: se niega a quitar el aire del Parlament

La presidenta del Parlament, Xelo Huertas, sigue a rajatabla las estaciones del año. Hoy empieza el otoño y, por consiguiente, ayer seguía disfrutando del...

La presidenta del Parlament, Xelo Huertas, sigue a rajatabla las estaciones del año. Hoy empieza el otoño y, por consiguiente, ayer seguía disfrutando del verano. El aire acondicionado del Parlament estaba puesto a toda pastilla en la sala de las Cariátides donde están los escaños de los diputados. Algunos parlamentarios se estaban helando e incluso se taparon con los folios de los discursos para evitar la corriente generada por el aparato refrigerador. Sin embargo, la presidenta del Parlament no percibía la sensación de frío polar, provocada porque muchos todavía llevan traje veraniego.

La diputada de Més, Margalida Capellà, solicitó a la presidenta parar el aire acondicionado para evitar congelarse y prevenir algún que otro molesto resfriado. Xelo Huertas se lo pensó unos segundos y se negó a que el empleado de la cámara autonómica le diera al interruptor del aparato. El argumento esgrimido por la jefa del Parlament fue que había otros diputados que tenían calor.

Capellà, junto a otras parlamentarias, no le quedó otro remedio que salir de la cámara en busca de una chaqueta que la protegiera del potente aire acondicionado de Xelo Huertas. Los de Més le recordaron a la presidenta del Parlament, cuota de Podemos, que el aire acondicionado incrementa el efecto invernadero del cambio climático. Incluso solicitaron un gran acuerdo parlamentario para no solo limitar a los turistas. También limitar la refrigeración de la cámara autonómica.

La sensación del Parlament de ayer fue ver a David Abril con corbata

No crean que el portavoz de Més, David Abril, ha cambiado de partido y se está dejando querer por el PP. El hecho de que ayer causara sensación en el Parlament con su planchada corbata no quiere decir que se haya vuelto de derechas. "Sigue tan rojo como siempre, no ha cambiado", aseveraba un compañero suyo de Més que también estaba muy sorprendido al observarle con la corbata. Lo que ocurre es que a Abril estamos acostumbrados a verle como utiliza la vestimenta con mensaje subliminal. Son famosas sus camisetas con frases reivindicativas y ni los más viejos del lugar recuerdan cuando fue la última vez que el parlamentario econacionalista se enfundó una corbata. Ayer Abril no hubiera desentonado en la bancada popular con su corbata con el nudo aflojado.

Algunos diputados, incluso cercanos a Abril, no daban crédito cuando el parlamentario de Més se personó a las 10.00 de la mañana con esta inusual prenda. Todos lo esperaban con una de sus habituales camisetas con dibujo. ¿Qué mensaje quiso mandar David Abril colocándose una corbata alrededor de su cuello?

¿Bauzá y Antich, senadores autonómicos o de partido?

José Ramón Bauzá y Francesc Antich, aparte de expresidentes del Govern, son senadores autonómicos por obra y gracia del Parlament y para representar al conjunto de Balears. Lo que ocurre es que a ellos solo les interesa lo que digan los portavoces de sus respectivos partidos. El martes Antich estuvo toda la mañana en la cámara autonómica para no perderse detalle del discurso de la socialista Francina Armengol. Bauzá ni apareció por el hemiciclo.

Ayer le tocaba el turno al PP con la réplica de la portavoz Margalida Prohens a la presidenta del Govern. Antich seguramente se quedó a cuidar su productivo huerto de Algaida, ya que no se le vio por el Parlament. En cambio, José Ramón Bauzá dejó todos sus quehaceres cotidianos de la farmacia de Marratxí y se pasó toda la mañana escuchando a Prohens. Un Bauzá, por ciento, que aguantó estoicamente y sin inmutarse las palabras de la portavoz de Podemos, Laura Camargo, que le llamó "muy poco honorable" cuando recordaba sus políticas de recortes y en contra del catalán.

Barceló convoca a Podemos a debatir sobre el alquiler y límites turísticos

El vicepresidente Biel Barceló, después del discurso de Laura Camargo que pedía regulación más estricta y límites al turismo masivo, se acercó sigilosamente a sus socios podemistas en el Parlament. Les invitó a una reunión para debatir la situación de los alquileres y el techo de visitantes. Era la forma de quitar el mosqueo del partido de los círculos tras las dudas sembradas por Armengol.

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