La subasta judicial en la que se repartieron los restos de Orizonia se saldó con la familia Fluxà de nuevo al frente de Viajes Iberia. La enseña, incluida en el conglomerado de Orizonia desde que Miguel Fluxà se la vendió en 2006, había sido puesta en marcha por el padre del actual dueño de Iberostar, que la recupera así para la familia. La jugada le sale redonda. Miguel Fluxà obtuvo en 2006 un total de 850 millones de euros (hay fuentes que hablan de 950) con la venta de Viajes Iberia, uno de las joyas del imperio turístico que diseñó su padre. La inyección de capital le vino de perlas al entramado turístico que crece en torno a Iberostar, pero, según relatan quienes le conocen, Miguel Fluxà vivió entre el dolor y el remordimiento la caída de Viajes Iberia, arrastrada por la ruina de Orizonia. Ayer el episodio quedó atrás: Iberostar se compró por 550.000 euros la marca Viajes Iberia, por la que también pujó duramente la aerolínea del mismo nombre, que llegó a ofrecer 495.000 euros. La empresa liderada por Miguel Fluxà y sus hijas (Sabina y Gloria) protagonizó así el mayor desembolso de una subasta en la que también se hicieron con las marcas Cuba (6.000 euros) e Ibero (1.000).

No fue la única compra con historia. Otro que recuperó ayer lo que fue suyo fue el inversor, empresario y ejecutivo turístico de máximo prestigio Eduardo Millán. En 2007, él mismo le vendió el tour operador Cóndor a Orizonia, empresa en la que se quedó como ejecutivo. Tras la caída del gigante turístico, Millán acudió ayer a la subasta, de la que salió con su marca recuperada. Cóndor le costó 1.500 euros.

Barceló y Globalia pujan

Entre los más activos estuvo también el grupo Barceló. Fue uno de los actores claves en el hundimiento de Orizonia y ayer no dejó pasar la ocasión de hacerse con algunas de las mejores marcas del holding turístico. Pagó para ello 38.000 euros por la enseña Viva Tours, al tiempo que se hacía por 8.500 euros con la enseña Iberojet. A la cartera del grupo presidido por Simón Pedro Barceló también se incorporan los nombres Turavia (1.000 euros), Orbest (otros 1.000), Citybreaks (200 euros) y Apptravel (1.250).

En el pulso de titanes turísticos que concluyó con la zozobra de Orizonia también estaba Globalia. El mayor holding del sector en España, presidido por Juan José Hidalgo, concurrió ayer a la subasta pra incorporar tres nuevas marcas a un grupo que tiene a Air Europa por bandera. Desde ayer, también las marcas Aerobalear (1.000 euros), Travelfactory (100 euros) y Solplan (2.057 euros) son parte del conglomerado de Hidalgo.

Nuevo dueño para Orizonia

Cuatro empresas más pescaron en una subasta en la que se repartían 51 marcas y dominios. Marblau se compró Cicerone (150 euros) e Informallorca (150). Terres Llunyanes se hizo con Tierras Lejanas (200 euros) e Iberski (330 euros). Mundosocial adquirió la marca Mundo por 100 euros. También encontró dueño la propia marca Orizonia, aunque su valor es hoy testimonial, tras haberse convertido en el nombre de un proyecto fallido. Aún así encontró quien pagase 200 euros por él: la marca Orizonia ahora es propiedad de Hospedaje y Bienestar, que además adquirió las enseñas Vibo (100 euros), Emotion Travel (100), Kirunna (100), Kaleidoscopio (100), Realspaintravel (50 euros), Tierradorada (100) y Travelcar (450 euros).

Otros lote se quedaron sin comprador: Ibercolor, Iberosenior, Infoviatges, La Saeta, Semana Superloca, Llamar y Viajar, Medi-Viatges, Televiajes, Antillas, N, Opteam, Flechazo, Escapada, Globbic, UBS, Smilo, D-Viagem y Castelltur.