María Teresa Fernández de la Vega viajó ayer a Palma para analizar con el presidente del Govern, Francesc Antich, y otros cuatro de sus consellers, la colaboración de Balears en los actos durante la presidencia española de la Unión Europea (UE) este semestre. Antich propuso que se tengan en cuenta las aportaciones de las islas en materia turística y crecimiento sostenible, a lo que se mostró muy receptiva De la Vega, puesto que "el sector turístico es clave en la economía balear", recordó. En el actual contexto de recesión económica, la vicepresidenta apuntó la importancia de "potenciar un turismo de calidad, sostenible e innovador, aprovechando las oportunidades que ofrece Balears como destino turístico".

De la Vega también informó que durante el mandato español de la UE "se introducirá un debate sobre el futuro de la cohesión territorial y las compensaciones a la insularidad", y defendió la necesidad de que la población balear no se sienta "aislada, sino parte de Europa", para que interiorice la ciudadanía europea y aporte a las instituciones su "gran potencial emprendedor".