Los datos que están trascendiendo tras los registros efectuados en el ´palacete´ de Matas en Palma hacen creíbles las sospechas de que el patrimonio acumulado por el ex president Matas no está acorde con lo que sería el sueldo de un político, por mucho que éste haya presidido una comunidad o haya sido ministro del Gobierno de España. El ex líder del PP balear deberá dar muchas explicaciones en su comparecencia de marzo, pero son pocos los que no creen que este enriquecimiento se ha producido de forma ilícita. La condena judicial será difícil de lograr si no se puede averiguar si existieron las dádivas. La ciudadana la tiene casi garantizada.