Eugenio Hidalgo, el ex alcalde por el Partido Popular de Andratx y uno de los implicados en la Operación Voramar, contra una supuesta trama de corrupción urbanística, será juzgado por presuntas injurias a Isabel Alemany, la concejal de Unió Mallorquina en dicha localidad. El juzgado de instrucción 8 notificó ayer en mano a Hidalgo la apertura de juicio oral contra él, una decisión que no puede recurrirse.
Paradójicamente Hidalgo, representado por Rafael Perera, probablemente se sentará por primera vez en el banquillo de los acusados por un tema menor, unas supuestas injurias a una compañera de consistorio. Estas diligencias son un fleco dentro del voluminoso caso Andratx, donde la fiscalía anticorrupción y la Guardia Civil imputan al dimitido alcalde un rosario de delitos contra la ordenación del territorio, cohechos, tráfico de influencias, negociaciones prohibidas, etc.
"Nazi y xenófoba"
Isabel Alemany, que desde 2003 mantiene una tensa batalla legal contra Hidalgo, ha interpuesto varias denuncias contra el antiguo alcalde por temas particulares o relativos a su familia, como el cierre de un aparcamiento en la playa de Sant Elm, o por irregularidades urbanísticas. Alemany sostiene que fue objeto de persecución, amenazas y presiones por el entonces alcalde.
La edil de UM que ha vuelto a salir elegida denunció a Hidalgo por llamarle "xenófoba" y "nazi" en la revista digital de Andratx "Ponent". Hidalgo remitió un escrito a la publicación en Internet como respuesta a un artículo anterior de Alemany.
El pasado 23 de febrero el acusado prestó declaración ante el juez Antoni Rotger por este caso. Hidalgo, según explicó después su abogado Rafael Perera, se mostró dispuesto a rectificar las expresiones consideradas injuriosas por la regidora y atribuyó sus palabras a unas frases del artículo de la denunciante.
Hidalgo añadió que él se había sentido ofendido por estas manifestaciones de Alemany, que la edil no reconoció como suyas y que atribuyó a un tercero.
Perera atribuyó a un tercero de mala fe el haber introducido en el escrito de Alemany la mencionada coletilla. El defensor se mostró confiado ese día en que el malentendido se aclarase y el juez decretase el archivo de la causa, circunstancia que no se ha producido en vista de la apertura de juicio.
