Una comisión integrada por funcionarios judiciales, del Cuerpo Nacional de Policía y de la Agencia Tributaria, procedió ayer a la apertura de varias cajas fuertes a nombre de presuntos implicados en la trama de lavado de dinero negro protagonista del caso Relámpago. Estos cofres de seguridad ya fueron localizados en la primera fase de la operación y quedaron precintados en espera de su apertura.

Algunas de las cajas fuertes estaban situadas dentro de sucursales bancarias, que fueron visitadas por la comisión judicial.

Al menos un titular de estos cofres ya había pedido al juzgado de instrucción 7 su apertura para poder recuperar documentos de clientes ajenos a la operación.

Análisis bajo secreto

Las pesquisas del caso Relámpago prosiguen a un ritmo lento debido al gran volumen de documentación que se ha intervenido en los varios registros practicados.

Los expertos de la Policía y la Agencia Tributaria están asistiendo a las interminables jornadas de sellado y numeración de todos los papeles incautados.

A medida que las comisiones judiciales revisan el contenido de caja caja, inspectores fiscales van pergeñando un plan de investigación y van seleccionando los expedientes más llamativos.

Querellados imputados

De momento, y formalmente, sólo aparecen como imputados en el sumario que instruye el juez Antoni Garcías los abogados, notarios, empresarios, directivos bancarios y presuntos testaferros que fueron incluidos por la fiscalía anticorrupción en su querella inicial.

El fiscal Juan Carrau, con base en informes de pesquisas iniciadas por la Agencia Tributaria hace dos años y en los datos de otras causas penales ya abiertas en los juzgados de Palma, elaboró una querella de unos 130 folios en los que imputa un rosario de delitos a los sospechosos.

Por este caso únicamente permanece encarcelado el industrial francés Patrick Duchemin, pero su prisión está decretada por el juzgado de instrucción 1.