Los partidos de la oposición coincidieron ayer al calificar la creación de una conselleria de Inmigración y Cooperación en el Govern de medida con fines electoralistas. Representantes de los grupos parlamentarios cuestionaron además la política de inmigración llevada a cabo por el Ejecutivo de Jaume Matas y la labor de la conselleria de Presidencia, dentro de la que hasta ahora se englobaba la dirección general de Cooperación.

Para la portavoz socialista Francina Armengol el hecho de que se hayan asignado al nuevo departamento que dirigirá Encarnación Pastor las competencias sobre las casas baleares en el extranjero hará que el PSIB se mantenga a la expectativa ante "los antecedentes" del caso Mapau, la presunta trama de captación ilícita de votos de inmigrantes de origen balear para el PP en las elecciones autonómicas de junio de 1999.

En similares términos se pronuncia Pere Sampol (PSM) quien califica la medida de "inversión de futuro" en relación a los inmigrantes extranjeros que en el futuro tendrán derecho a votar. El portavoz de EU-EV, Miquel Rosselló, ve como "una incoherencia total" asignar a Inmigración las relaciones de las casas baleares en el exterior.

En sentido contrario se manifiesta la presidenta de UM, Maria Antònia Munar, que considera "buena" la iniciativa.

El delegado del Gobierno, Ramon Socías, también muestra su preocupación por los antecedentes de Mapau,"con tantos paseos por las casas regionales de América". Añade que "llama la atención que en 2005 el Gobierno destinara 3,5 millones de euros" a proyectos de cooperación y este año 8 millones y "desde la Comunidad no se hayan presentado programas".

Los presidentes de la Casa Catalana, Josep Planas, y de la de Castilla y León, Constantino Cardo, consideran acertada la decisión de Matas. Cardo reconoce que "se había hablado que interesaría que algún miembro peninsular tenía que estar en el Govern para que las peticiones estén mejor cubiertas", así como "las subvenciones, programas y actuaciones".

La unión de Cooperación e Inmigración es positivo para trabajar en el codesarrollo, opina la secretaria general de la Federación de Inmigrantes, Marlene Perea.