Conflicto en el transporte de Baleares y Canarias por el uso del tacógrafo

Los sindicatos rechazan «de forma contundente» cualquier modificación de su utilización, mientras que las patronales piden que se tenga en cuenta la insularidad

Las patronales y sindicatos de Baleares y Canarias durante la reunión con Josep Marí Sebastián Franquis.

Las patronales y sindicatos de Baleares y Canarias durante la reunión con Josep Marí Sebastián Franquis. / DM

Redacción

La pretensión de las patronales del transporte de Balears y Canarias de aplicar adaptaciones a la norma que regula el uso del tacógrafo ha abierto un cisma en el sector en ambos archipiélagos.

Así, patronales y sindicatos de los dos territorios se reunieron ayer con el conseller de Movilidad y Vivienda balear, Josep Marí, y con su homólogo en Canarias, Sebastián Franquis, y pusieron sobre la mesa sus peticiones e inquietudes. Ezequiel Horrach, presidente de la Federación de Empresarios Balear de Transportes (FEBT), señaló que la Ley vigente perjudica a las empresas cada año con «sanciones millonarias» debido a que contempla grandes trayectos que en las islas no se producen. «La norma establece que como máximo se pueden conducir sin parar cuatro horas y media, pero en Balears es imposible estar encima del volante sin parar, y si no se modifica bien el tacógrafo, caemos en infracciones», explicó. 

Su homólogo por la patronal del sector de Canarias, José Agustín Espino, quiso dejar claro que los empresarios no buscan quitar el tacógrafo, que lo que quieren es «modularlo» porque «en los territorios insulares su uso no se planteó bien». Apuntó en este sentido que uno de los problemas a los que se enfrentan es al traslado marítimo y lo que eso implica en la jornada laboral. «Hay problemas con los descansos. Proponemos que se tengan en cuenta los transbordos de los barcos, porque cuando se creó la norma no se crearon infraestructuras para los empleados y así poder cumplir la ley». 

En este sentido se manifestó Horrach, quien criticó que la norma establece que los chóferes han de parar un mínimo de nueve horas, «pero lo que no contempla es que dentro de otras tres horas el empleado vuelve a coger el barco y vuelve a descansar otras siete horas de trayecto, porque va en camarote, con lo cual al final descansa catorce horas». 

La postura al respecto por parte de los sindicatos es bien distinta. Pep Ginard, secretario general de la Federación de Servicios a la ciudadanía (FSC) del sindicato CCOO, fue contundente al explicar que cuando los transportistas deben coger un ferri para llegar a otras islas o a la península es un tiempo en el que «están a disposición de la empresa, no se van de crucero, con lo que mientras se esté a disposición de la empresa, se está trabajando».

En esta misma línea se pronunció José Cambrón, de la Federación de Servicios para la movilidad y el consumo de UGT, además de incidir en que el tacógrafo «es una herramienta fundamental para regular el tiempo de trabajo y la seguridad en la conducción». Por este motivo ambos sindicatos mostraron ayer su «rechazo contundente» ante cualquier adaptación o regulación de uso que difiera a la norma existente en el resto de Europa.

Por otro lado, tanto UGT como CCOO piden la derogación del Real Decreto 1082/2014 que cambió los descansos durante la conducción. «Cada cuatro horas y media trabajadas había que parar 45 minutos, mientras que tras la modificación se estableció que dentro de esas horas se hicieran tres descansos de quince minutos», especificó Cambrón.

Abiertos a la modificación

Sebastián Franquis y Josep Marí, durante la rueda de prensa en la conselleria.

Sebastián Franquis y Josep Marí, durante la rueda de prensa en la conselleria. / DM

Los gobiernos balear y canario se comprometieron ayer a estudiar la modificación del uso del tacógrafo que piden las patronales del transporte, aunque eso sí, «sin traspasar los límites de la seguridad vial y la no merma de los derechos de los trabajadores», especificaron Josep Marí y Sebastián Franquis. Según explicaron, se ha encargado un estudio «que indique si podrían darse esas adaptaciones» y cuyo resultado será trasladado a las patronales y los sindicatos.

Insistieron, así, en que la modificación solo se llevará a cabo si hay acuerdo entre trabajadores y empresarios, «si no no cambiaremos asuntos de esta naturaleza».

Otros asuntos que se trataron en las reuniones

1 Descuento del 75%: «Es un derecho adquirido»

Los gobiernos autonómicos de Canarias y Balears defendieron ayer como «un derecho adquirido de los isleños» el descuento del 75% en los billetes de avión y barco para sus viajes dentro de los archipiélagos y entre las islas y el resto de España. «Es importantísimo compartir sinergias entre los dos territorios que nos permitan consolidar las estrategias políticas que hemos llevado a cabo en aspectos tan importantes como el descuento de residente», apuntó Josep Marí.

2 Torres de control: Reticencias ante los planes de Aena

Tanto Josep Marí como Sebastián Franquis coincidieron ayer, durante las reuniones mantenidas con patronales y sindicatos de Balears y Canarias, en sus reticencias respecto a los planes que tiene Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) para privatizar la gestión de las torres de control de los aeropuertos de Palma, Gran Canaria, Tenerife Norte y Tenerife Sur, un proyecto al que ambos gobiernos han presentado alegaciones.

3 Fusión Air Europa-IAG: Preocupa la merma de la conectividad

En cuanto a la compra de Air Europa por parte de IAG, Marí y Franquis aseguraron que «estarán vigilantes» porque, aunque resaltaron que «hay compañías en nuestro país para asumir esa cuota de mercado, preocupa una merma de la conectividad y de las rutas establecidas». «Debemos garantizar que los slots en vigor no se vean reducidos», incidieron los dos responsables autonómicos.

Suscríbete para seguir leyendo