En el intermedio de los grandes debates televisivos sigue prevaleciendo una encarnada lucha por el voto útil. Eso se nota de forma especial en circunscripciones de complejo escaño autóctono como Baleares. Sin embargo, esta vez,con pactos de gobierno inevitables a la vista, el reclamo del voto aprovechable se produce ya a cualquier nivel.

Para eso ha venido este lunes de Pascua Pedro Duque a Palma, bajo el paraguas de una mayor inversión en ciencia e innovación y aún con los ecos de la entrevista que Pedro Sánchez concedió a este periódico reclamando para sí la utilidad de una confianza que impida un acuerdo entre Ciudadanos y Vox. Un partido, este último, interesado en hacer hincapié en la suma de sus candidatos antes que de las listas electorales, pero sin perder ocasión de destacar candidatos de un cierto impacto. El último, el empresario Juan Nigorra de Calvià.

Vox hospeda a desencantados del PP proclama, también al ser entrevistado por Diario de Mallorca, que aquí no hay más voto útil que el de Veus Progressistes para llevar voz propia a Madrid y desbaratar un eventual entendimiento entre PSOE

No es precisamente la postura que defiende el mutante Joan Mesquida al atribuir ahora a su adscripción independiente a Ciudadanos la capacidad de reconocer, con efectos de financiación solvente, la insularidad de Balears. Por estos canales se mueve la pugna por el diputado voto útil cuando se está entrando en la recta final de la campaña electoral y a sabiendas de que todavía queda mucho indeciso por convencer.