Huerna

La pugna por controlar la concesionaria de una autopista astur-leonesa llega al Tribunal Supremo

Globalvía logra que se admita el recurso contra la sentencia que le negó el derecho a entrar en el consejo de administración del grupo Itínere

Puente de la autopista del Huerna sobre el embalse de Barrios de Luna.

Puente de la autopista del Huerna sobre el embalse de Barrios de Luna. / Fernando Geijo

Javier Cuartas

La enconada pugna judicial por el control de Itínere, el grupo titular del 100% de Aucalsa, concesionaria de la autopista astur-leonesa del Huerna, se dirimirá en el Supremo. El alto tribunal ha admitido un recurso de la sociedad española Globalvía contra el fallo de la Audiencia Provincial de Vizcaya que le negó el derecho a tomar asiento en el consejo del grupo concesionario y designar a tres representantes.

Globalvía posee el 23,74% de la compañía de autopistas de modo directo y alcanza el 40% con la suma de otra participación indirecta a través de la sociedad Arecibo.

Desde el verano de 2017 Itínere es objeto de una pugna por su control entre Globalvía, una empresa especializada en desarrollo y operación de infraestructuras, y el otro gran accionista de referencia, que entonces era la gestora estadounidense Corsair Infrastructure Partners y desde el año pasado es el fondo holandés de pensiones APG, que controla el 60% de la dueña de Aucalsa mediante una alianza con Corsair, que sigue en el capital, aunque ahora como socio minoritario.

Sucesivas demandas y laudos jalonan la disputa en el grupo titular del 100% de Aucalsa

Sucesivas demandas en distintos juzgados de Madrid y País Vasco y varios laudos han jalonado la disputa durante los últimos seis años en el empeño de ambos bloques de hacerse con el control de Itínere.

Globalvía había llegado a acuerdos de adquisición de acciones a diversos inversores que le hubiesen dado la mayoría absoluta y el dominio de Itínere de no ser porque uno de ellos, la compañía española Sacyr, optó finalmente por transferir su 15,5% a Corsair, lo que le otorgó a este fondo la hegemonía.

Una sentencia de la Audiencia Provincial de Madrid desestimó el año pasado un recurso de apelación interpuesto por Globalvía contra un fallo judicial previo que había reconocido en 2020 a Sacyr la capacidad para enajenar su participación en Itínere a Corsair pese al acuerdo previo que había alcanzado con Globalvía, que invocaba por ello el derecho preferente de adquisición.

En paralelo, un juzgado de lo mercantil de Bilbao rechazó en noviembre de 2020 la pretensión de Globalvía de que se le reconociera la pretensión de formar parte del consejo de Itínere y la capacidad de designar a tres representantes en virtud del 40% que ya controla en la sociedad. El fallo fue recurrido, pero la Audiencia Provincial de Bilbao lo confirmó en septiembre de 2021 al considerar que Globalvía, en tanto que gestor de infraestructuras, es competidor de Itínere.

Ahora, la sala de lo Civil del Tribunal Supremo ha admitido a trámite, con fecha de 27 de septiembre, los recursos extraordinarios por infracción procesal y de casación planteados por Globalvía contra la sentencia de la Audiencia Provincial de Bilbao. El Supremo señala en los fundamentos de Derecho del auto emitido que concurren "los presupuestos y requisitos legalmente exigidos, no advirtiéndose en esta fase causa legal de inadmisión". La parte contraria puede ejercer, no obstante, su oposición a esta decisión.

Globalvía mantiene simultáneamente la aspiración de hacerse con la hegemonía accionarial, por lo que prosigue con el proceso judicial contra la venta por Sacyr del 15,5% de Itínere a Corsair.

Itínere gestiona seis autopistas de peaje en el norte de España, que suman 524,8 kilómetros. Además de la Autopista Concesionaria Astur-Leonesa (Aucalsa), controla Audasa, Audenasa, Autoestradas de Galicia, Acega y Gesbisa.

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