Que no te engañen estas vacaciones: los trucos de la policía para detectar estafas en Airbnb y Booking

Un nuevo tipo de estafa amenaza con arruinar las ansiadas vacaciones de numerosas familias. Según los expertos, los casos de engaño han experimentado un incremento alarmante del 35% en los últimos años, aprovechándose de la virtualidad de la oferta, las ofertas de última hora y el temor a presentar denuncias.

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La Policía Nacional lleva tiempo actualizando sus consejos para informar y educar a los consumidores sobre estas estafas. Además, cuenta con la colaboración de Airbnb, una plataforma digital especializada en alojamientos, que ha realizado una encuesta revelando que seis de cada diez clientes admiten haberse vuelto más exigentes y sensibles al precio de los alquileres vacacionales en el último año.

De acuerdo con los datos recopilados por el estudio en el que también participó Confianza Online, se vislumbra un escenario en el que posibles estafadores persuaden a los viajeros potenciales para realizar pagos mediante transferencias bancarias, valiéndose de anuncios falsos, páginas web clonadas o llamadas telefónicas. La Policía advierte sobre esta práctica riesgosa.

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La Policía Nacional ofrece una serie de consejos para evitar estafas en alquileres vacacionales, teniendo en cuenta que la prisa y el miedo a no encontrar una buena opción son factores que predisponen a caer en ellas. Estos son algunos de los consejos:

1. Tener cuidado con los mensajes que contengan enlaces sospechosos en correos electrónicos. Dichos enlaces podrían llevar a páginas web falsas que imitan el diseño de las compañías de alquileres vacacionales con el objetivo de robar información personal o infectar el dispositivo del usuario. En estos casos, se recomienda regresar a la página de inicio.
2. Desconfiar de las ofertas con precios excesivamente bajos que van acompañadas de imágenes atractivas de alojamientos.
3. Desconfiar si el propietario del alojamiento propuesto realiza numerosos cambios en el proceso de reserva, como modificar el método de pago, o si proporciona direcciones de contacto que no coinciden con el anuncio y ofrece un alojamiento diferente al mostrado en la página.
4. Buscar anuncios con evaluaciones positivas y verificar que la identidad del anfitrión y otros datos de la cuenta hayan sido verificados o confirmados.
5. Al realizar el pago, desconfiar de los propietarios que soliciten transferencias bancarias en lugar de utilizar la plataforma de reserva. También se debe sospechar si proponen el uso de empresas dedicadas normalmente al envío de dinero, cheques bancarios y giros postales.
6. Prestar atención a un tono urgente que presione a los huéspedes para realizar la reserva, así como a incoherencias por parte del anfitrión en cuanto a su idioma, nacionalidad, zona de residencia, prefijos telefónicos y contenido del anuncio del alojamiento.
7. Utilizar el buscador de imágenes de los principales motores de búsqueda de Internet para comprobar si las imágenes corresponden a diferentes alojamientos ubicados en distintas zonas geográficas.

En caso de haber sido víctima de una estafa, la Policía recomienda presentar una denuncia para que se investiguen los hechos, así como informar de los anuncios y los propietarios a la plataforma correspondiente para que tomen las medidas necesarias. Además, es importante recopilar y documentar todas las pruebas y evidencias relacionadas con la estafa y el anunciante.