Escalada clásica, deportiva y boulder, ¿conoces los principales tipos de escalada?

Aunque hay subcategorías, estas son las tres principales maneras de afrontar una pared o roca, llegando alguna de ellas a formar parte del programa olímpico

Escalada deportiva. Foto: Shutterstock

Escalada deportiva. Foto: Shutterstock

Los valores que van intrínsecos en los deportes de montaña y en la escalada hacen que se tenga en cuenta no solo el qué se ha logrado, sino el cómo se ha conseguido. Para ascender una cumbre no es lo mismo realizarla por una cara que por otra, con oxígeno o sin él. En escalada ocurre lo mismo a la hora de valorar un ascenso, según la cara elegida, el nivel de dificultad de la misma (existen grados para medir dicha dificultad que van del cuarto al noveno) si la vía de ascenso está provista de anclajes, si se sube sin cuerda… En definitiva, importa el camino elegido y su sacrificio, no solo el resultado de la foto final en la cumbre. La escalada -como los deportes de montaña- no es una pose y aquí no sirve solo el qué, sino el cómo.

Atendiendo a las diferentes variables para negociar una pared o roca, existen principalmente tres tipos de escalada: clásicadeportiva y boulder.

Escalada clásica

Escalada clásica / .

Escalada clásica

Es la más purista y tradicional, esa que el escalador es quien va marcando su paso y estableciendo sus anclajes en la pared para ascender y quitándolos cuando ya no los necesita para asegurarse. La roca no está equipada y no existe una inspección previa de la vía por lo que requiere de una exhaustiva planificación tanto del paso como de la ubicación de cada anclaje. Este tipo de escalada eleva la técnica y habilidad a la de alguien experto.

Además de una correcta elección del ascenso, la clave en la escalada clásica es situar correctamente los puntos de anclaje, que básicamente se realiza mediante dos tipos de herramientas que se pueden retirar de la roca tras el ascenso: ‘friends’ o dispositivos de leva (unos palos con un muelle y ruedas giratorias que se abren entre grietas para fijarse sólidamente); y fisureros o calzos (cuñas metálicas con extremos de metal cónicos que se pueden encajar en grietas en la superficie de la roca).

Dentro de este tipo de escalada hay otras versiones que aunque conservan la autenticidad de un ascenso, varían ligeramente en la forma de ejecución:

  1. A. Clásica con anclajes: son rutas preequipadas, pero cuyos anclajes están muy distantes unos de otros. A veces, al principio y al final. Está a camino de la escalada clásica y la deportiva (equipada), aunque por la dificultad, planificación y la necesidad de establecer puntos de anclaje intermedios lo acerca más a la clásica.
  2. B. Clásica simultánea: es una de las más practicadas cuando se va en pareja, ya que mientras que uno asegura la vía, el que le sigue la va desmontando. Es una escalada en la que prima la velocidad y coordinación (y eficiencia) del trabajo en equipo.
  3. C. Solo libre o solo integral: este tipo de escalada tiene un Oscar (‘Free Solo’), gracias al documental de Alex Honnold en el monolito de El Capitán (914 m), del Parque Nacional de Yosemite. Se trata de escalar sin cuerda y en esta, además de una habilidad y técnica descomunal, prima la fortaleza mental. Este punto psicológico es clave y el factor diferencial para practicar este tipo de escalada puesto que, por destreza, muchos escaladores que realizan ascensiones tradicionales con anclajes podrían practicarla ya que no terminan utilizándolos (no se caen o cometen errores). Sin embargo, suben con la certeza y confianza de tener un seguro de vida. En el solo integral no se cuenta con este colchón.

Escalada deportiva

Es una ascensión con la pared o roca ya equipada. No es necesario atornillar o apretar levas o fisureros, sino que ya están anclados en la pared. La vía ya está preparada y solo falta que por ella pasemos cuerda y mosquetón para realizar el ascenso.

Este tipo de escalada permite ir más ligero en la ascensión, es más rápida y requiere menos compromiso. Es la escalada ‘pop’ que surgió en la década de los 80 y ha permitido que los principiantes disfruten de este deporte tanto en rocódromos (interiores y exteriores) como en la naturaleza.

El boom de esta disciplina es tal que hasta se ha convertido en deporte olímpico, siendo en Tokio 2020 su estreno, junto con las disciplinas de boulder y velocidad en la prueba combinada, donde tuvimos a los primeros campeones olímpicos de la historia en el español Alberto Ginés y la eslovena Janja Garnbret. Y como novedad en los próximos JJ.OO. de París 2024 habrá dos prueba, una que combine la escalada deportiva (dificultad) y boulder, y otra de velocidad.

Boulder

Boulder / .

Boulder

Es la escalada extrema por excelencia. Se da en bloques de roca de entre 1,5 y 15 metros y no se utilizan elementos de protección para realizarlo. Prima la dificultad para superar el obstáculo que cada escalador elija y aquí se combina el ascenso con movimientos horizontales. Lo importante es superar los llamados ‘problemas’ que te plantea la roca, por lo que la estrategia es tan fundamental como en una partida de ajedrez. Debes reflexionar sobre varios movimientos a realizar, no solo en el siguiente.

Se requiere de una habilidad y potencia muy grande y se puede realizar solo, normalmente colocando una colchoneta en el suelo. Aquí el escalador con una gran técnica de ejecución tendrá ventaja sobre alguien que escale de manera veloz.

Dentro del boulder, hay una modalidad que añade peligrosidad por la altura a la que se ejecuta, el llamado ‘highball bouldering’.

Como se ha mencionado anteriormente, esta disciplina también forma parte del programa olímpico combinada con una de ascenso de dificultad.