El Toro RC ya está en marcha. El conjunto calvianer inició la pretemporada este pasado lunes en las instalaciones de Son Caliu. No quiere dejar nada a la improvisación ya que afronta el momento deportivo más importante de sus 32 años de existencia: participar de forma digna y competitiva en la segunda categoría del rugby español, la División de Honor B.
Siendo conscientes de que la plaza que en su momento habían cedido al Babarians XV Calvià podía perderse, al renunciar la franquicia al proyecto que durante cinco años ha puesto cara y ojos al rugby balear a nivel nacional, la directiva del club taurino encabezada por su presidente Pablo Mateu decidió dar continuidad a la aventura. Esta vez asumiendo el propio El Toro RC todo el riesgo, tanto a nivel económico como deportivo.
Producto autóctono
Rigiéndose desde el primer momento bajo una filosofía deportiva muy marcada, El Toro Rugby Club competirá en la División de Honor B con ‘sus’ jugadores, prescindiendo (al contrario de lo que hacía el Babarians) de efectivos de los otros clubes que componen el rugby balear y tirando de sus propios recursos.
De esta forma, con el núcleo duro del equipo que en las últimas temporadas ha dominado la Liga Balear, más la llegada de exjugadores que vuelven a sus orígenes tras dar por finalizada sus aventuras deportivas fuera de la isla, el club calvianer espera conseguir el objetivo de la permanencia en una categoría que esta temporada será especialmente dura.
Jalo Piña, el referente
Es, sin duda alguna, el jugador más talentoso que ha dado el senior masculino de El Toro en los últimos años. Con experiencia en el propio Babarians, Cisneros de Madrid y el Amatori Novara (Italia), Jalo Piña ha sido un fijo tanto en el sub-23 como en el primer equipo de El Salvador (Valladolid) y su retorno a Mallorca es toda una bendición para el actual plantel calvianer.
A sus 24 años, y con toda la experiencia sumada fuera de la isla, tanto de medio de melé como de apertura, será el director de orquesta ideal para un grupo humano en el que también cabe destacar el retorno a los terrenos de juego de dos ilustres veteranos como son Juan Manuel Montes ‘Chicho’ y Roberto Vich.
Volverán a calzarse las botas para ayudar «en lo que sea» a un equipo que también contará con la presencia del apertura/centro Francisco Loza (exjugador del Babarians) y Agustín Capoccetti (tercera). Ambos vienen de jugar en el Caldas de la Primera División portuguesa y aportarán un punto de competitividad a un bloque inexperto en la categoría.
Volver a juntar a los hermanos Doiztua (Iñaki, Sergio y Rodrigo) puede ser más que interesante, mientras que la incorporación del tercera francés Noahm Subra (ex del UST Tarascon) es de momento toda una incógnita, a la espera de que muestre todo el potencial que de él se supone.
En el apartado técnico, el exjugador Lluís Bibiloni se encargará de la preparación física del equipo y Diego Bravo (responsable del senior femenino) actuará de entrenador asistente, mientras que el técnico principal será el argentino Nicolás Aprea, exasistente en el ya desaparecido Babarians.
Calendario exigente
La competición arranca el 2 de octubre. Enclavados en el grupo B, El Toro RC visita en la primera jornada al BUC de Barcelona. Son Caliu acogerá (si las obras de acondicionamiento han acabado) al potente CAU de Valencia y al Sitges de forma consecutiva, para en la cuarta fecha visitar al San Cugat.
Serán 22 jornadas, once rivales contra los que luchar y un único objetivo: dejar al rugby balear en el segundo escalón nacional por sexta temporada consecutiva. Lo de ascender a la máxima categoría no deja de ser a día de hoy un sueño de imposible realización.
