Alberto Corbacho (Palma, 1984) ha anunciado este martes que se retira del baloncesto. Toda una pérdida para el deporte de la canasta mallorquín, que se despide de uno de sus referentes desde hace más de una década tras su paso por la ACB -ocho temporadas- y con una destacada trayectoria en la que llegó a ser internacional absoluto con la selección española y a disputar la Euroliga.

El alero ha compartido una emotiva carta titulada ‘Pelotita, nunca dejes de rodar’ en la que expresa sus sentimientos en un momento tan difícil. “Querida pelotita de basket, llegaste a mi lado cuando apenas sabía caminar. Fuiste mi primer juguete y desde entonces te convertiste en mi cómplice de aventuras. Mi pasión por ti llegó a ser mi forma de vivir. Por el camino, me has dado y demostrado mucho. A tu lado he crecido, he mejorado y también he cometido errores, pero siempre he intentado ser mejor jugador y, sobre todo, una buena persona”, ha iniciado el texto uno de los mejores jugadores que ha dado la prolífica cantera del Sant Josep Obrer de Palma. Corbacho, que se despidió del Hestia Menorca de la LEB Plata, su última experiencia profesional, también ha defendido la camiseta del Bàsquet Muro (EBA), Unicaja de Málaga (EBA), Ciudad de Huelva (LEB), CAI Zaragoza (LEB), Hospitalet (LEB Oro), Breogán (LEB Oro), Obradoiro (LEB Oro y ACB, durante seis temporadas), Baskonia (ACB y Euroliga) y Gipuzkoa (ACB), antes de jugar las tres últimas campañas con el club de la isla vecina.

Corbacho, de dos metros, disputó 226 partidos en la ACB, anotando 2.080 puntos, capturando 57 rebotes y repartiendo 206 asistencias. Tal y como recuerda hoy ACB.com, queda para la retina sus dos triunfos (2013/2014 y 2014/2015) en el Concurso de Triples de la Liga Endesa. “Especialmente destacable fue su actuación en los cuartos de final de la edición de 2014, cuando sumó 28 de los 30 puntos posibles, tras errar solo dos de los 25 lanzamientos de que dispuso”, reza el texto. De hecho, su extraordinaria puntería desde la larga distancia fue lo que marcó toda su carrera en la elite. En las ocho temporadas que jugó en la Liga Endesa lanzó 1.406 veces de tres puntos (37,5% de acierto) y solo 231 de dos, lo que evidencia su tendencia a alejarse de la canasta para lanzar. Eso sí, desde la línea de libres era infalible (93,7%).

Su buena labor en la pista le valió debutar con la selección española absoluta -en 2004 había disputado el Eurobasket sub-20 en la República Checa- para la preparación del Europeo en 2013 tras recibir la llamada del entonces seleccionador, Juan Antonio Orenga. El 13 de agosto de aquel año cumplió su sueño ante Polonia (70-66) al disputar unos segundos en un combinado en el que también estaba el mallorquín Rudy Fernández y el menorquín Sergi Llull, junto a Marc Gasol, Calderón o Ricky Rubio, entre otros.

El mallorquín ha subrayado la importancia de sus personas más cercanas durante su etapa como profesional: “A mi familia, mamá, Marco, Miki, que siempre habéis estado ahí, no sé cómo agradeceros todo vuestro soporte incondicional tanto en los buenos momentos como en los malos. Gracias de corazón. Os quiero. Y también a mi compañera de viaje de estos últimos años, gracias por estar siempre a mi lado. Quérote muito”. Y como si mantuviera una conversación con su fiel ‘amigo’, su carta finaliza con un mensaje lleno de cariño. “Pelotita, después de más de 1.310 triples sonando ‘choof’, siento que ha llegado la hora de despedirnos, de separar nuestros camino después de tantos años compartidos. Yo aquí me paro, pero tú nunca dejes de rodar. Muchas gracias, pelotita. Muchas gracias, baloncesto”, concluye. Deja un enorme legado por su talento y carisma, dentro y fuera de las canchas, que han provocado numerosos mensajes de cariño de clubes, excompañeros y aficionados a través de las redes sociales.