La selección española de piragüismo inauguró este sábado su medallero en la primera prueba de la Copa del Mundo de esprint, que se está disputando en Szeged (Hungría), con los oros del mallorquín Marcus Cooper Walz y Rodrigo Germade en K2 500 y de Tano García y Pablo Martínez en C2 500.

Marcus Cooper y Rodrigo Germade demostraron que el K2 se les da bien, aunque su máxima prioridad es el K4, una modalidad que sí será olímpica en los Juegos de Tokio y donde el mallorquín tiene ya asegurada su plaza. «Es un gustazo estrenarse de esta manera, con un oro en el K2 500, que entrará en el programa olímpico para París 2024. Esta prueba a Rodrigo y a mí nos encanta», reconoció el palista mallorquín al término de la prueba celebrada en Hungría.