El mallorquín Joan Mir acabó la primera carrera de la temporada con un sabor agridulce. El vigente campeón del mundo entraba en la última curva del trazado en segunda posición, pero el motor de las Ducati le llevó a terminar cuarto en Catar. «En la última curva me he colado un poco. Es verdad que me he abierto más, pero también venía de más lejos y la aceleración no ha sido mala. Si no me pasaba nadie por paso de curva, tampoco tendría que haberme pasado nadie en la recta. Pero yo me esperaba que me pasaran. Me esperaba que pasara uno, no los dos, así que ha sido una sorpresa muy ingrata, pero también estoy convencido de que, si no hubiera adelantado a Zarco, hubiera cogido su rebufo y no me hubiera pasado Pecco. No me he querido conformar con la tercera posición. He querido más y por la ambición seguramente me he quedado sin el podio. Ahora es lo que tengo que hacer. Tengo que probar, arriesgar e ir a por todas. Es el momento de dar espectáculo», señaló el mallorquín cuestionado por la última recta. 

Pese a ese ultimo varapalo, Mir reconoció que se trataba de la carrera que esperaba: «No sabía hasta qué punto podía llegar, pero estaba gestionando mucho las gomas. Estaba muy tranquilo en ese sentido y positivo en ese momento, derrapando lo menos posible. Estaba sacrificando dos o tres décimas por vuelta, pero luego esas décimas han vuelto a mí. Me esperaba una carrera de menos a más y tener opciones al podio. La verdad es que el equipo ha hecho un trabajazo y nos hemos quitado un peso de encima, porque tenía sensaciones preocupantes. Ha sido una pena que la carrera no durara unas vueltas más, porque hubiéramos luchado por algo más».