Fue una cuestión de pegada. De falta de acierto en el área rival. Otra vez el Palma Futsal no aprovechó las ocasiones claras que tuvo frente a un grande para llevarse la victoria y perdió por 3-1 frente al Movistar Inter pese a tener ocasiones claras para llevarse algún punto de Torrejón. Jesús Herrero brilló con luz propia y fue el mejor de su equipo. Entre él, los palos y la falta de puntería explican el resultado y que el Palma Futsal no puntuara.

Hubo un tiempo en el que el portero del Palma Futsal era el mejor en cada partido ante los grandes. Esos días, si el equipo era contundente en las pocas ocasiones que tenía en el área rival, podía puntuar. La película ha cambiado radicalmente con el paso de los años. Tanto, que el guión ahora es casi el contrario. El partido confirmó que el nivel competitivo del Palma Futsal no tiene nada que envidiar a los tradicionales grandes de la competición. Ya firmó un gran partido en el Palau Blaugrana y repitió en Torrejón de Ardoz. Y en ambos casos perdió porque falló en la definición. Desde el primer minuto, el equipo balear salió a la pista con la intención de ser el protagonista del partido. Lolo sirvió un saque de esquina en bandeja a Raúl Campos, que remató a placer en el segundo palo. Golpe de los de Vadillo que no tuvieron tiempo para celebrar y que los interistas devolvieron de la misma forma. Saque de esquina que sacó al primer palo Martel y entre Boyis y Joao desviaron a la red sin que Barrón pudiera parar la acción. Movistar aprovechó la inercia del gol para buscar la portería rival y Cecilio aprovechó la ocasión para marcar el segundo y remontar.

Higor protege el balón acosado por un jugador del Movistar Inter. HELEN BOTO/MOVISTAR INTER FS

El Palma no acusó los goles y mantuvo la dinámica buscando cambiar la suerte en los metros finales. La falta de puntería penaliza. Tomaz y Raúl Campos tuvieron un dos para uno que salvó Herrero y el rechace lo cazó Claudino y buscó el hueco para lanzar un misil que pegó en la escuadra. Al final llegó el tercero.