Rafel Nadal ha reinado Roland Garros de 2005 a 2020 con trece victorias. Para entender el monopolio del mallorquín, en los quince años anteriores a su primer título hubo hasta once ganadores del torneo por excelencia sobre tierra. Nunca antes, no solo en la historia de los Internacionales de Francia, sino en ninguna otra competición, ha habido un dominio tan aplastante como el del mallorquín. Solo Martina Navratilova, con doce títulos en un torneo menor como el de Chicago, suma tantos títulos en un mismo torneo.

Para encontrar un tenista que impusiera su ley en Roland Garros de manera parecida a Nadal hay que remontarse al sueco Bjorn Borg, que entre 1974 y 1981 conquistó seis títulos, los cuatro últimos de forma consecutiva. Después de este último título y otros cinco Wimbledon, decidió retirarse de la competición a los 26 años cuando se mostraba imbatible.

En los tres lustros anteriores a la primera victoria de Nadal en París, solo tres tenistas levantaron más de una vez la Copa de los Mosqueteros. Fueron el norteamericano Jim Courier en 1991 y 1992, el catalán Sergi Bruguera en los dos años siguientes, y el brasileño Gustavo Kuerten en 1997, 2000 y 2001, lo que da mayor trascendencia a la gesta del mallorquín, que pese a su manifiesta superioridad ha tenido que lidiar con dos de los mejores tenistas de la historia, el suizo Roger Federer, al que ha ganado cuatro veces en el Bois de Boulogne, tres en finales, y el serbio Novak Djokovic, al que ha derrotado siete veces en la central de la Phillipe Chatrier, tres en el duelo decisivo. Además, también ha batido dos veces al que está llamado a ser su sucesor en superficie de tierra, el austriaco Dominic Thiem, pese a que ya ha cumplido los 27 años.

Entre los vencedores en Roland Garros antes de la tiranía impuesta por Nadal figura Carlos Moyá, actual entrenador del tenista de Manacor, que triunfó en 1998, con 21 años, al derrotar en la final al catalán Àlex Corretja, hoy afamado comentarista de televisión. El hoy entrenador, que al año siguiente alcanzó el número uno del tenis mundial por espacio de quince días, contaba con calidad de sobra para haber sumado algún título más en París, al ser un consumado especialista en tierra.

El ecuatoriano Andrés Gómez en 1990, el austriaco Tomas Muster en 1995, el ruso Eugeny Kafelnikov en 1996, el norteamericano Andre Agassi en 1999, Albert Costa en 2002, Juan Carlos Ferrero en 2003 y el argentino Gastón Gaudio en 2004 son el resto del elenco de tenistas que triunfó en París.

Con Nadal en escena, ha dejado las migajas a unos pocos. A Federer en 2009, que aprovechó la eliminación del mallorquín en octavos ante el sueco Robin Soderling, en lo que fue la primera de sus dos únicas derrotas en Roland Garros en 102 partidos; a Wawrinka en 2015, que derrotó en la final a Djokovic aprovechando la lesión en la muñeca del manacorí; y al año siguiente el actual número uno, que levantó su único título en París tras eliminar en cuartos a Nadal, en lo que hasta el momento es su última derrota.