El Atlético Baleares ha viajado hoy a Málaga para disputar la final por el ascenso a Segunda y en la despedida no ha estado solo. Tras celebrar la directiva y la primera plantilla una comida de hermanamiento en Son Malferit, decenas de aficionados y niños participantes en el campus de verano han querido demostrarles su apoyo y enviarles fuerza para el reto que tienen por delante, que no es otro que conseguir el ansiado ascenso a Segunda División.

Tras la comida, a la que han asistido el presidente de la FFIB Miquel Bestard y la consellera Fina Santiago, los más pequeños han realizado un pasillo a los jugadores de camino al autobús. Una vez allí, el humo blanquiazul de las bengalas y los cánticos de los aficionados que no han querido perder la oportunidad de acercarse para despedir al equipo les han acompañado hasta subir abandonar el estadio rumbo a Son Sant Joan. El equipo ya ha aterrizado en la ciudad andaluza y esta tarde realizará el primer entrenamiento.

El conjunto dirigido por Manix Mandiola tiene por delante cinco días de preparación antes del trascendental play-off de campeones que les medirá en el estadio de la Rosaleda al Cartagena, campeón del Grupo IV de Segunda División B. El encuentro se disputará a partir de las 22.00 horas y podrá verse a través de la plataforma Footers.