Centrado en el segundo aniversario de su academia y en el anuncio de expansión de la misma, Rafel Nadal evitó hacer referencia alguna de su vuelta al circuito después de retirarse, hace un mes y medio, en la semifinales del US Open aquejado de problemas en su rodilla. Su ausencia en el circuito le apartó de la gira asiática en los torneos de Beijing y Shanghái. El próximo lunes arranca el último Masters 1000 del curso en París-Bercy, una cita marcada en rojo por las declaraciones de su entrenador Carlos Moyà como el posible escenario de su regreso. El extenista mallorquín matizó también que su pupilo "no arriesgará si su rodilla no está lista todavía". Nadal debe defender el número uno del mundo en la ciudad de la luz debido a que Novak Djokovic está solamente a 215 puntos de arrebatarle el trono de la ATP. En caso de optar por la prudencia y renunciar a reaparecer en el noveno Masters 1000, el mallorquín tendría una nueva oportunidad de hacerlo en la última parada del curso reservada a los ocho mejores tenistas del año. Una cita para la cual el vigente campeón de Roland Garros ya tiene el billete asegurado de forma matemática.