El menorquín Sergi Llull, el serbio Milos Teodosic, el francés Nicolas Batum, el turco Omer Asik y el griego Giannis Antetokounmpo serán algunas de las grandes estrellas a las que todos echarán de menos dada su ausencia por uno u otro motivo.

En el equipo español la falta de Llull es ciclópea, máxime si se tiene en cuenta que se lesionó la rodilla derecha (rotura del ligamento cruzado anterior) en el partido de preparación contra Bélgica en Tenerife el pasado 9 de agosto.

El base-escolta menorquín estaba llamado a ser el gran líder del equipo junto a los hermanos Gasol, Pau y Marc, y su ausencia aún la andan rumiando todos los integrantes de la selección.

Pero además de Sergio, también faltan Nikola Mirotic, en un momento muy delicado en la NBA; Rudy Fernández y Felipe Reyes que prefirieron descansar, Víctor Claver por lesión y por el mismo motivo Pau Ribas. De Serge Ibaka no se volvió a saber nada.

Serbia, subcampeona olímpica y mundial, tampoco está 'entera'. La baja de Milos Teodosic es comparable a la de Llull en España y también cuenta con las bajas de Nikola Jokic, Nemanja Bjelica, Nemanja Nedovic, Miroslav Raduljica y Nikola Milutinov.

No menos desolados están los griegos por la ausencia de Giannis Antetokounmpo. El ala-pívot de los Milwaukee Bucks era su principal argumento en su intento de volver a la élite europea y de soñar con la medalla de oro. Pese a las ausencias por retirada de Spanoulis y Zisis, los griegos sólo tenían la baja de Koufos, pero ahora sin Antetokounmpo su futuro parece bastante más incierto.

Francia también tiene bajas de peso. A la retirada de Tony Parker tiene que sumar las ausencias de Nicolas Batum, Rudy Gobert, Fabien Causeur, Mickael Gelabale y Charles Kahudi, entre otros. Aun así, están entre los favoritos con un Nando de Colo y un Boris Diaw que deben dar un paso adelante.

Turquía, anfitrión de la fase final, se agiganta cuando juega en casa pero ha tenido bajas importantes entre sus hombre altos como Omer Asik, Ersan Ilyasova y Enes Kanter.

Los italianos podrían ser otro claro aspirante a todo, pero les ha salido la peor rama del carácter mediterráneo. Andrea Bargnani y Alessandro Gentile han tenido una temporada nada florida y no estarán con el equipo nacional, pero el colmo ha sido lo de Danilo Gallinari: perdió los papeles en un amistoso dando un puñetazo a un rival, a consecuencias del cual se fracturó un dedo y no estará.

Pocos equipos se libran de bajas más o menos importantes. Polonia pierde a su referente, Marcin Gortat, y Lituania a una de sus figuras emergentes como Domantas Sabonis; y el veterano Paulius Jankunas ha preferido descansar.

Ante Tomic no cuenta para la selección croata, pero, además, los NBA Mario Hezonja, Ante Zizic e Ivica Zubac no estarán. Igual que Zoran Dragic con Eslovenia, ya que no se ha recuperado de una lesión de rodilla.

Viktor Sanikdze es baja por lesión en Georgia y Chequia se ha quedado con un juego interior muy limitado por la lesión de Ondrej Balvin y por la renuncia de Jan Vesely. Palabras mayores.

Sergey Karasev es otra baja sensible en Rusia, una selección que se lleva preparando demasiado tiempo para volver a surgir con una nueva generación de jugadores y que no acaba de dar con la tecla.