Jorge Lorenzo, doble campeón del mundo de MotoGP y segundo en 2013, realizó un breve repaso por lo que ha sido su temporada en el transcurso de un acto en el que apadrinó la aparición de un nuevo juego para consolas, que también fue el motivo de decoración de su casco en el último Gran Premio de la Comunidad Valenciana. Durante el acto, el mallorquín insistió en las apreciaciones que ya hizo durante el fin de semana en Valencia, en las que aseguraba que "era muy, muy difícil, casi imposible, ganar el campeonato". Lorenzo explicó que hasta ahora nunca estuvo en una situación parecida, en la que "se ha ganado o se ha perdido el título por solo cuatro puntos".