El defensa mallorquinista Javier Dorado, que tuvo que abandonar el terreno de juego del Reyno de Navarra a los tres minutos, será intervenido quirúrgicamente el próximo martes en la clínica Asepeyo de Sant Cugat de una lesión en el menisco y los ligamentos. Hasta que no pase por el quirófano no se conocerá el verdadero alcance de la lesión del jugador, aunque las previsiones son pesimistas. En el mejor de los casos estaría entre tres y cuatro meses de baja por lo que el miércoles dijo prácticamente adiós a la temporada.

El jugador, que en la Copa disfrutó de sus primeros minutos en el presente ejercicio por otra lesión que le ha mantenido inactivo los tres últimos meses, dijo ayer en IB3 Ràdio que notó "un chasquido" y que en seguida se dio cuenta de la importancia de la lesión: "No sé lo que me ha pasado, pero creo que me lo he roto todo", le dijo al doctor Pericás cuando se dirigía a los vestuarios.

Con la baja de Dorado, Manzano dispone únicamente de un lateral izquierdo nato, Fernando Navarro, con el riesgo que ello supone. Dorado, que recibió la llamada del presidente Vicenç Grande para darle ánimos, renovó por una temporada al término del pasado ejercicio futbolístico.

Por otro lado, el jugador del Athletic Club Koikili Lertxundi, que el próximo domingo visita al Mallorca, destacó ayer la "regularidad" del equipo, a pesar de haber dado "una imagen bastante homogénea" en el último mes ante rivales "bastante fuertes"" y, remarcó, en un momento en el que "había bastantes dudas de la gente".