A estas alturas es aventurado cebarse en los dos equipos mallorquines que deambulan por la LEB Oro, sobre todo por tratarse de un deporte en el que la sorpresa está siempre al acecho hasta el último suspiro de la competición. Pero la realidad es que los dos conjuntos isleños se regalan disgustos. El Palma Aqua Mágica, que se ha caracterizado por su ambición, está remiso a abrir más el grifo económico y lastrar un presupuesto que supera con creces los dos millones de euros.

Apagafuegos. Ángel Colino ha heredado la trayectoria de los celestes después de la destitución de Diego Tobalina. El recurso ha estado en casa. En otras palabras, ningún dispendio más. Ya debió lidiar hace dos temporadas el técnico pacense con la más fea cuando se le colocó al frente del equipo tras cortar a un poco comunicativo Mario Palma, absorto en su mundo y ajeno a su entorno cercano. Al final puso a los palmesanos en los play offs finales. El club debió pagar los bonus a sus jugadores por entrar en la fase decisiva y cayó en primera ronda.

Unos pupas. Mientras el Palma Aqua Mágica es decimoquinto en la clasificación tras once jornadas, cuarto por la cola, el Bàsquet Inca tampoco luce en la categoría. Una vez más cayó por una diferencia mínima, en esta ocasión de un solo punto en su visita a La Palma (Canarias). Son penúltimos y la situación se rodea de espinos. Habrá que seguir teniendo el referente del Vive Menorca, que consigue flotar en la ACB, mientras en la isla mayor, con unas doce veces su población y seis su superficie se persigue el sueño de militar entre los grandes. Algo habría que copiar. El voleibol femenino ha invertido este estatus. El sábado, el Ícaro demostró que es mejor (0-3) que sus vecinas del Ciutadella.

Los árbitros se equivocan. El término error se aplica con confusión en el mundo del fútbol. Debería aplicarse a una acción desacertada o equivocada y no sólo a una decisión que perjudica los intereses de uno de los contendientes. Habría que hablar de fallo positivo cuando el colegiado beneficia a uno de los dos equipos. Tanto trabalenguas viene a cuento de que ayer el Real Mallorca tuvo una ayudita del malo de la película. No vio un penalti de Lux sobre Íñigo e incluso castigó al jugador del Murcia con una amonestación. Debería caer algún regalo más para compensar los rotos de anteriores jornadas, pero como todos los tan profesionales del balompié evitan hablar de los favores de terceros, no sea que influyan en sus primas y fichas, que a fin de cuentas son el parámetro que primordialmente les afecta después del minuto 90. No en balde su vida deportiva es muy corta y deben velar por sus familias (y futuras generaciones si saben administrar sus patrimonios).

Manzano se coloca. No sería nuevo que el técnico mallorquinista siguiera la estela de Luis Aragonés. Ya sucedió cuando el jiennense suplió la marcha del madrileño del Atlético, en la campaña 2003/04 y después de adjudicarse la Copa del Rey con el Mallorca. Ahora se da a entender que el andaluz está en la lista de posibles sucesores del actual seleccionador tras la Eurocopa 2008. Por el momento se frena cualquier negociación de renovación en el club rojillo, sin olvidar que Mateu Alemany puede convertirse en presidente de la Federación Española. Todo huele bien, aunque el perjudicado vuelva a ser la entidad isleña.