La Federación Balear de Kárate solo ha conocido a tres presidentes desde su creación en 1977 y muchos, la gran mayoría, sólo a uno, Juan Luis Solano (Palma, 1952), que ejerce como tal desde 1984. Treinta y dos años como máximo responsable de este deporte en esta comunidad, más de media vida suya la ha pasado con esta disciplina olímpica. Ahora lo deja. Iba para presidente de la Española pero la jugada no le ha salido bien y dejará el cargo el próximo día 4 de febrero, que será cuando se elegirá a su sustituto.
—32 años de presidente. Qué barbaridad.
—Entré en 1986 aunque dos años antes ya ejercía ya que presidía una gestora ya que la federación se quedó sin presidente al dimitir Andrés Crespí. La territorial se fundó en 1977 y su primer presidente fue Raúl Herreros.
—¿Cómo llegó ahí?
—Era subdirector de un banco y tenía mucha presión en el trabajo. Me asfixiaba. Mi amigo, Salvador Cabalín, junto con su hermano, Andrés, fueron mis senseis en el club Tenshin, que su logo era la pantera rosa. Poco a poco me inculcaron la filosofía del kárate. Me gustó y empecé a practicarlo. Al cabo de un tiempo la federación se quedó vacía de poder y la familia Cabalín me dijo que entrara para poner orden en ella gracias a mi formación administrativa.
—Habla de la filosofía.
—El kárate sin la filosofía que lleva detrás es un deporte más. Aporta una serie de valores que tal vez en otras disciplinas no se potencian tanto, como es la solidaridad, respeto, educación, humildad y dignidad, una serie de valores que vienen de la filosofía japonesa. Una premisa que siempre me ha marcado ha sido ‘No querer ser siempre superior al otro, simplemente ser humilde en la vida’. O lo que me decía mi profesor: ‘siempre hay uno que sabe más que tú, en todo en la vida’. El kárate te ayuda mucho a formar el tipo de carácter.
—32 años, la mitad de años que tiene usted. ¿Cómo es posible aguantar tanto tiempo?
—El gran secreto ha sido rodearme de técnicos y árbitros supercompetentes. Ha sido una gente que, sin ningún tipo de gasto, al revés, aportando trabajo y horas ‘robadas’ a la familia, han levantado la federación, y esto desde el año 1986. No hay más, estar rodeado de un gran equipo técnico. No querer meterte en cosas que no sabes. Por ejemplo, yo no soy técnico, ni juez ni árbitro y nunca me he metido en sus cosas. Mi misión ha sido gestionar la federación con los pocos recursos que tenemos. Este ha sido el secreto.
—¿Ha sido un camino de rosas?
—No, tengo claro que no. Siempre he intentado llevarme bien con todos. Solo en el primer mandato tuve una candidatura contraria pero no salió elegida. La suerte que tuve es que conseguí para la federación gran parte de esa candidatura para que me ayudasen. Nunca he querido marginar sino aglutinar esfuerzos para el bien común, que no es otro que el deporte del kárate.
—¿Cómo deja este deporte?
—En España tenemos un nivelazo, en katas somos campeones del mundo y en kumite estamos dentro de los cinco primeros a nivel global. En Balears, gracias al gran trabajo de los técnicos, nos temen en la península cuando antes éramos la ‘princesita’ o la panacea.
—Llegó la hora de dejarlo.
—Sí. Me presenté para una candidatura para la Española y no fue bien. Lo dejo por eso. El día 4 de febrero habrá elecciones si hay más de un candidato. Afortunadamente para este deporte una de las personas, que es un colaborador mio, el vicepresidente de la Balear y el delegado de Mallorca, que ha hecho un trabajo impresionante, puede ser mi relevo.
—¿Cómo se puede mantener la ilusión en todo este largo tiempo?
—Ver que tu trabajo se traduce en triunfos, que los clubes de cada vez tienen más actividad y licencias y observar la ilusión de los técnicos y de toda la gente que tienes detrás. Yo solo he gestionado.
—Los clubes...
—Siempre he buscado que vivan lo mejor posible y afortunadamente no se ha cerrado ninguno por falta de alumnos. Controlamos mucho los alumnos, hacemos cursos y estamos muy atentos a la salud de los niños, es importantísimo. Cualquier deporte para los niños es importante pero si encima les inculcas una serie de valores que te irán bien para la vida pues ya es genial.
—En 32 años habrá vivido de todo.
—Sí, las alegrías superan las tristezas. Ha habido momentos de debilidad, especialmente en periodos de legislatura política ya que veías que no tenías ningún tipo de apoyo de las instituciones. .
—Con qué se queda.
—-Ufff, resopla- Con las medallas que han obtenido nuestros deportistas, como Cristina Ferrer e Irene Colomar, que las ví nacer deportivamente. Y en parakárate muy emocionado con la progresión de Ester de León y Bartolomé Ferrer. Cuando los veo se me caen las lágrimas. A nivel licencias tenemos más de 1500 y 20 clubes. Lo que queremos erradicar son los gimnasios piratas. Lucho contra esto desde que entré, pero es muy difícil. Es vital para todos que al niño le enseñe una persona titulada ya que como le inculques la filosofía de violencia mal iremos. No basta tener un diploma en japonés o chino que nadie entiende y que no significa nada. Deben estar homologados.
