Este lunes, a las 12 horas, tendrá lugar en el hotel Barceló Sevilla Renacimiento la rueda de prensa del jurado Prix Formentor, donde con la lectura del acta se dará a conocer el nombre galardonado en esta edición, la del cambio inesperado. 

A partir de este 2021, el galardón recupera su itinerancia y título, Prix Formentor. En esta nueva etapa, las reuniones del jurado y las ceremonias de entrega serán itinerantes, siguiendo la ruta que se trazó durante la primera parte de la historia del premio impulsado por la alianza de los editores europeos.

Este año, en concreto el 10 de octubre, tal y como ha podido confirmar este periódico, el acto de entrega del Formentor tendrá lugar en Túnez, en concreto en el hotel Barceló Concorde Les Berges du Lac. 

Se estrena al mismo tiempo el comité de honor de la Fundación Formentor con los nombres de: Roberto Calasso, Antoine Gallimard y Anagrama. Los presidentes de las editoriales Adelphi, Gallimard y Anagrama son reconocidos y homenajeados en este comité de honor como miembros ilustres de la escuela editorial europea y herederos de los editores que fundaron el Prix Formentor. 

«La idea es dar continuidad a las Converses Literàries, trabajamos en ello», explica Basilio Baltasar

Después de diez años de la segunda época del premio, el galardón pretende «rendir tributo a las obras maestras, alentar su intrépida lucidez, fomentar el buen gusto, la certeza de lo excelente y la elegancia cultural», señalan desde la Fundación Formentor, organizadora del galardón dotado con 50.000 euros gracias al mecenazgo de las familias Barceló y Buadas. 

El director de dicha fundación, Basilio Baltasar, que ya no está en Santillana, cuenta que también está presente la idea de dar continuidad a las Converses Literàries, que se trabaja en ello, pero que de momento no hay nada decidido. Lo que está claro es que no se celebrarán en Formentor este año. «No me atrevo a aventurar si podrían celebrarse en Mallorca una vez el hotel esté reformado, eso habría que hablarlo con los nuevos administradores», comenta. «Era una actividad cultural que podía materializarse por el alojamiento que prestaba Barceló y no sabemos si Four Seasons estaría dispuesto a hacerlo», apunta. Por el momento, se ha optado por el nomadismo del premio, algo que ya estaba en su ADN, mientras se da con la mejor solución para las Converses.