Políticos, representantes de diversos sectores de la sociedad civil, así como colectivos y asociaciones de distintos ámbitos compartieron en redes sociales sus palabras preferidas en catalán, con el hashtag #parauladesantjordi, para unirse a la iniciativa de la Dirección General de Política Lingüística Per Sant Jordi, una paraula.

La presidenta del Govern, Francina Armengol, fue de las primeras en sumarse eligiendo la palabra aferrada. Todos los consellers del ejecutivo también quisieron participar, como Martí March, quien a través de un vídeo explicó por qué escogió la palabra safareig. El vicepresidente Juan Pedro Yllanes optó por retrobament, mientras que la consellera Fina Santiago se decantó por calabruix.

Desde otras instituciones también se apuntaron al juego. Así, la presidenta del Consell, Catalina Cladera, defendió la palabra confiança, y el Ayuntamiento de Manacor, llibre.