Cinco bares de la calle Blanquerna serán, durante cinco jueves consecutivos, a partir del 28 de febrero, los escenarios de una nueva edición, la número 13+1, del Teatre de Barra, que en esta ocasión estará dedicada a la superstición. La gran final tendrá lugar en el Teatre Mar i Terra el 30 de marzo.

La programación incluye cinco piezas: tres comedias, un drama y una tragicomedia. Cuatro de ellas se representarán en catalán y una en castellano. Es la segunda vez que el Teatre de Barra se instala en Blanquerna, el tercer barrio de Palma que se visita tras sus pases por Santa Catalina y Canamunt. Los bares elegidos son Clàssic Blanquerna, In Café, Cafeteria Bon-Bon, La Tertúlia y Blanquerna 65. Se pueden adquirir las entradas en Arribar, en el número 27 del Carrer Ausiàs March, de 18.00 a 00.00 horas.

En cuanto a las obras, el público podrá descubrir Trampa perfecta, de Joan Bennàssar, con dirección de Josep Mercadal e interpretación de Catalina Rossell y Joan Carles Bestard; L'un a l'altre, de Xisco Rosselló, comedia dirigida por Joan Fullana y ejecutada por Alexandra Palomo y Miquel Àngel Torrens; Tot, de Toni Gener Ferrero, dirigida por Rodo Gener e interpretada por Alex Tejedor y Jordi Cumellas; La marca de Júlia, de Rafel Gallego, dirigida por Joan M. Albinyana con los actores Joan T. Sunyer y Patricia Monzón; y Atlantic (en castellano), de Maria Cristóbal Otxandio, comedia protagonizada por Héctor Seoane y Juanma Palacios y dirigida por Xavi Núñez.

El jurado estará compuesto por críticos, actores, directores y programadores: Salvador Oliva, Santi Celaya, Josep A. Mendiola, Javier Matesanz, Natalia Rabassa, Laura Gost y Carlotta Oliva. Serán ellos quienes decidan el premio al Mejor texto. El público, por su parte, votará por los galardones a la obra preferida, actor y actriz.

Entre las novedades destacar el horario, que se adelanta 30 minutos. Así la primera función arrancará a las 20 horas. Las siguientes se desarrollarán a partir de las 20.35, 21.10, 21.45 y 22.20 horas. La temática, la ya citada superstición, que sucede a otras cuestiones ya tocadas en anteriores ediciones como fueron el cine, el teatro dentro del teatro, el erotismo o la muerte.

"Nos consolidamos en la primera edición", presume Javier Matesanz. "El Teatre de Barra ha sido un éxito desde el principio, con una fórmula que funciona, la de ocio, cultura y gastronomía", y que seduce al sector del teatro, tanto a los directores, que prueban "nuevos lenguajes y ritmos", como a los actores, encantados de trabajar la cercanía con el público, "sentir el aliento de los espectadores y trabajar en caliente".