Woody Allen ya tiene en sus manos la multipremiada película de animación Woody & Woody, de los mallorquines Jaume Carrió y Laura Gost. El director y la guionista de este cortometraje, que inició el 2018 llevándose un Goya al mejor cortometraje de animación, resolvieron viajar a Nueva York y probar suerte: acercarse al cineasta y darle una copia.

El viaje era la celebración del 25 aniversario de la autora del guión. No lo dudaron y Gost y Carrió compraron entradas para asistir al concierto en el hotel Carlyle, donde Allen acude cada lunes a tocar su clarinete. En este establecimiento de Manhattan transcurre la película mallorquina.

La audacia se vio compensada, y el autor de películas como Annie Hall o Misterioso asesinato en Manhattan, aceptó el regalo, el DVD de Woody & Woody y charló un rato con sus artífices. Por el momento, no saben si la ha visionado.

En horas bajas, su hija Dylan Farrow lo ha acusado de abusos en plena campaña del Me Too que está sacando a la luz un sin fin de abusos sexuales sufridos por actrices y también actores, Allen ha decidido quebrar su hábito de filmar una película al año. Ha anunciado recientemente que se va a tomar un año sabático.

Con todo, la guionista mallorquina Laura Gost ponderó sus virtudes profesionales al recibir el Goya el pasado mes de enero. Jamás ha ocultado que si Woody Allen la llamara para participar en alguna de sus película, le diría que sí. "La única certeza que tengo sobre sobre Woody Allen es que es una figura imprescindible en la historia del cine", dijo aquella noche mágica que ha lanzado al estrellato una película de animación que quizá hoy esté viendo su inspirador: Woody Allen.