"Es la novela más ambiciosa que he escrito", dice Llucia Ramis. "Está llena de vergüenzas familiares, de pérdidas familiares y de silencios familiares". Les possessions es una obra que cuestiona las estructuras impenetrables que envuelven las familias, siempre llenas de secretos. La escritora la ha ambientado en un pueblo inventado de Mallorca, "que podría ser cualquiera". De una manera u otra, Mallorca siempre está ahí para Ramis, aunque se fuera con 18 años a Barcelona: "Mallorca para mí es como una madre". En la isla está parte de su mundo e imaginario y por eso, por una parte, "quieres que todo siga igual". Al mismo tiempo, pero, cada vez que vuelve hay algo que le hace pensar "es que no cambiará nunca". "Es un poco esta contradicción", comenta entre risas. A Barcelona la asocia más como a un amante. "Mallorca no es una opción, Mallorca es tu casa, no lo puedes evitar" dice como si no hablara de ella. No obstante, hay una reflexión

en el libro a la que Ramis se refiere cuando habla de Mallorca como su casa: "¿A quién pertenecen las casas ¿A quién ha nacido allí ¿A quién ha hecho que la perdieras". Entonces sentencia: "Yo puedo decir que no podemos perder Mallorca, no podemos perder nuestra casa. Pero yo no vivo ahí". ¿De quién es casa, pues, Mallorca