La superiora general de la Compañía de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl, Evelyne Franc, que recogerá hoy en Oviedo el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia, llamó ayer la atención de Europa sobre el "sufrimiento" que padecen los emigrantes.

La religiosa aseguró que "ahora es el momento de que Europa abra los ojos y los oídos para conocer la realidad que la rodea" e instó a la sociedad a que preste "una gran atención a las cuestiones de justicia social, de reevangelización y a las nuevas pobrezas que se crean como en el tema de la emigración, con todos los sufrimientos y problemas que conlleva".

La superiora señaló que el objetivo de la misión de la Compañía "es estar siempre cerca de los emigrantes, para insertarlos en la sociedad y, sobre todo, haciendo un esfuerzo para comprenderles y ser testigos del amor de Dios para con ellos".