Un hombre aceptó ayer una condena de tres años y medio de prisión por colarse en un coche y poner un cuchillo en el cuello a una joven para llevarse su bolso en Son Ferriol, en Palma. El acusado, que tenía ya varios antecedentes, logró un botín de 21 euros. Ayer reconoció los hechos y se declaró autor de un delito de robo con intimidiación y uso de armas con las agravantes de disfraz, ya que actuó con el rostro cubierto, y reincidencia. La fiscalía rebajó su petición inicial de cinco años de prisión tras alcanzar un acuerdo con el abogado defensor, Miquel Àngel Ordinas.

Los hechos ocurrieron el pasado 11 de abril, poco antes de las diez de la noche, en la avenida del Cid de Son Ferriol. Un matrimonio y su hija de 25 años salieron de un restaurante y se dirigieron a su coche, aparcado en esa calle. La pareja se sentó delante y la chica, en la parte trasera. Antes de que el vehículo arrancara, un hombre se metió dentro. Llevaba la cara tapada con una braga y la cabeza cubierta por una capucha.

El intruso abordó a la joven. "El dinero, el dinero", le dijo mientras trataba de arrebatarle el bolso. La víctima se resistió a entregarle sus pertenencias. El delincuente sacó entonces un cuchillo que llevaba escondido y se lo puso a la chica en el cuello, consiguiendo así hacerse con su bolso. Conseguido el objetivo, emprendió la huida a la carrera.

Tanto el padre de la víctima como varios testigos salieron tras él. Durante la persecución, el atracador cogió 21 euros que había en la cartera y luego se deshizo del bolso. Consiguió escapar momentáneamente, pero la Policía Nacional logró detenerlo poco después. El acusado es un hombre de 43 años que en 2011 y 2013 ya fue condenado por sendos robos y que permanece en prisión desde el atraco en Son Ferriol. Tras el asalto, la joven tuvo que ser atendida en un centro hospitalario al sufrir una crisis de ansiedad.

La fiscalía consideró que estos hechos constituían un delito de robo con intimidación y uso de armas con las agravantes de disfraz y reincidencia. Por ello, reclamaba inicialmente cinco años de prisión para el acusado, así como que indemnizara a la víctima con 2.000 euros por los daños morales sufridos a consecuencia del robo a punta de cuchillo padecido.

El ministerio público rebajó ayer su petición de condena, antes de la celebración de la vista en un juzgado de lo penal de Palma, al alcanzar un acuerdo de conformidad con la defensa. Así, el hombre compareció en la sala y reconoció los hechos, aceptando una condena de tres años y medio de cárcel.

El atracador fue excarcelado para la celebración del juicio y trasladado a Vía Alemania por la Policía, que una vez concluida la vista oral lo llevó de nuevo al centro penitenciario de la carretera de Sóller.