Unos 300 gramos de cocaína por semana era la droga que vendían los narcotraficantes detenidos el miércoles en el transcurso de la 'Operación Reko II', continuación de otra redada desarrollada el pasado mes de octubre. La Guardia Civil detuvo a cinco personas -tres marroquíes y dos españoles- y ha desmantelado otros tantos activos puntos de venta de esta sustancia estupefaciente.

Desde tres domicilios de Pollença y el Port de Pollença, una peluquería en esta localidad y un establecimiento de marroquinería y souvenirs del Port d'Alcúdia se vendía la cocaína continuamente a los consumidores. Estos dos locales usaban el negocio como mera tapadera para el tráfico de sustancias estupefacientes. Buena prueba de la activa venta de droga de esta banda es que, en el momento de la entrada y registro del miércoles, los agentes de la Guardia Civil intervinieron 200 gramos de cocaína en papelinas dispuesta para su venta.

El cabecilla de esta banda residía a espaldas del Colegio Costa i Llobera de Pollença. Pese a que no tenía ningún oficio conocido desde el año 2011, disfrutaba de un elevado tren de vida. Su fuerte no era la discreción. En su domicilio tenía coches de alta gama, motos de gran cilindrada y dos embarcaciones. De hecho, una de ellas, de unos siete metros de eslora, la pretendía alquilar como chárter.

Durante el registro en los domicilios y en los locales, los investigadores de la Guardia Civil han intervenido 100.000 euros en billetes pequeños, joyas y numerosos objetos electrónicos valorados en unos 40.000 euros.