La intervención a un joven grafitero de una agenda negra repleta de bocetos y firmas que aparecían estampados en los muros de Palma sirvió a la Policía Local de Palma para desvelar su supuesta participación directa en pintadas en muros de Ciutat. Un joven de 30 años fue detenido por un presunto delito de daños al patrimonio histórico por dibujar un grafiti en la muralla renacentista de la capital balear.

La investigación de agentes del Grupo de Investigación y Seguimiento de Denuncias (GIS) de la Policía Local de Palma se inició en agosto del pasado año. El mes de agosto encontraron a una pareja en el interior del edificio de Gesa. El hombre tenía en su poder una agenda con bocetos y firmas que aparecían en pintadas.

A partir de estos datos, una patrulla de la Policía Local que se encargaba de vigilar lugares frecuentados por grafiteros encontró el 14 de septiembre del pasado año una llamativa pintada en la muralla renacentista de Palma. En concreto, este grafiti estaba en la calle Bala Roja. Este lugar está catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC) y posee el nivel A1, la protección máxima del patrimonio histórico.

Cotejado por ordenador

La investigación de los agentes del GIS empezó con un gran reportaje fotográfico. Todo el material recopilado se cotejó por ordenador con los bocetos y las firmas que aparecían en la agenda de tapas negras que había sido intervenida a un hombre en el edificio de Gesa.

Así, el pasado 23 de febrero los agentes analizaron todo ese material, que les resultaba tremendamente familiar. Tras un análisis exhaustivo del antiguo edificio de la compañía Gesa y de las pintadas que aparecían estampadas en su muros se llegó a la conclusión de que el autor era el mismo propiterario de la agenda repleta de bocetos.

La culminación de esta investigación se materializó el pasado viernes. Los agentes del GIS acudieron de nuevo al antiguo edficio de Gesa y detuvieron al hombre como presunto autor de un delito de daños contra el patrimonio histórico de Palma.