Un asaltante esperó a que la camarera de un local de la Playa de Palma se quedara a solas para desvalijarle el dinero de la caja. El delincuente también acuchilló a la víctima en una clavícula para amedrentarla y eliminar cualquier atisbo de resistencia. Agentes de la Policía Local detuvieron instantes después al atracador, de nacionalidad alemana, y recuperaron los 600 euros que había arrebatado de la recaudación.

Los hechos ocurrieron sobre las cuatro de la madrugada de ayer en un establecimiento situado en la calle Marbella de la Playa de Palma. Cuando la camarera del bar acababa de hacer caja y se disponía a echar el cierre se percató de la presencia de un cliente en la puerta.

La empleada reconoció a esta persona, un hombre de 47 años de nacionalidad alemana que había estado esa misma noche consumiendo en el interior del bar, y sospechó que podría haberse dejado algo olvidado dentro. A continuación, la camarera le abrió la puerta y le franqueó el paso a su compatriota.

Antes de que la víctima pudiera reaccionar, el sujeto se abalanzó sobre ella y le propinó un fuerte empujón. El asaltante sacó un objeto punzante y le realizó a la empleada un profundo corte a la altura de la clavícula derecha. La herida tenía unos cinco centímetros de longitud y unos dos centímetros de profundidad.

A continuación, el asaltante se dirigió directamente a la caja registradora y sustrajo todo el dinero que allí encontró. El botín fue de unos 400 euros en billetes y unos 200 en monedas. Acto seguido, el atracador emprendió la huida tras enfilar la calle Acapulco.

La camarera era perfecta conocedora de la cantidad de dinero que le había robado, ya que acababa de hacer caja. De inmediato, la víctima llamó a la Policía para denunciar el atraco que acababa de sufrir.

Agentes de la Policía Local se personaron rápidamente en el establecimiento de la calle Marbella de la Playa de Palma. La herida de arma blanca que presentaba la camarera a la altura de la clavícula derecha dejaba a las claras que había sido atacada por un atracador momentos antes de su llegada.

Los policías avisaron a las asistencias sanitarias para que atendieran a la víctima del profundo corte que sufría a la altura de la clavícula. A continuación, los agentes dieron una batida por la zona para tratar de capturar al asaltante.

Al cabo de unos minutos, los policías se toparon con un individuo en la calle Samil que encajaba con la descripción del sospechoso. Al ver acercarse el coche patrulla, el delincuente tiró la cartera sustraída a otro alemán detrás de una verja e intentó huir. Los agentes se lo impidieron y le encontraron en la mochila los 600 euros recién sustraídos en el bar. Fue detenido por robo con violencia e intimidación.