Un juzgado penal de Palma ha condenado a cinco años de prisión a un hombre de origen paraguayo por atracar a mano armada una gestoría de la ciudad el pasado verano. El sospechoso, que se encuentra encarcelado en la actualidad, confesó ayer los hechos ante el juez y se declaró responsable de un delito de robo con violencia y dos faltas de lesiones. Además de lograr hacerse con una suma de más de 3.000 euros, el acusado intimidó y atacó a dos empleados, que resultaron heridos. El asaltante, de 38 años de edad, aceptó ayer una pena de cinco años, que se sustituye por la expulsión del territorio nacional por un periodo de diez años.

Además, el magistrado le impuso dos multas, la prohibición de aproximarse a la oficina que fue atracada durante cinco años y que indemnice a los dos empleados perjudicados por las lesiones causadas.

El imputado, que actuó armado con una pistola simulada y encapuchado, consiguió apoderarse durante el asalto de más de 3.000 euros y tres teléfonos móviles. Nada más irrumpir en el inmueble, se dirigió hacia un trabajador al que cogió del cuello y lo arrojó al suelo. A otros dos empleados los intimidó y les dijo que no se movieran. Una vez consiguió el botín, se dio a la fuga, pero poco después fue detenido por la Policía.

Los hechos enjuiciados se remontan al pasado 5 de julio de 2013. Aproximadamente a las dos y media del mediodía, un joven, con el rostro cubierto con un pasamontañas y que llevaba un arma de fuego simulada, entró de forma repentina en una gestoría ubicada en la calle Rubí, en Palma.

El atracador se dirigió hacia tres trabajadores que estaban en la oficina y les exigió el dinero. A uno de los empleados lo agarró del cuello y lo lanzó con violencia contra el suelo. Mientras, a los otros dos les obligó a que no se movieran al tiempo que les pedía los objetos de valor y dinero que hubiera allí.

De esta manera, el sospechoso logró desvalijar más de 3.000 euros y tres teléfonos móviles y huyó del lugar. Su fuga duró poco tiempo porque tanto la Policía Local de Palma como la Policía Nacional se movilizaron rápidamente y los agentes lograron atraparle.

Una vez detenido, el imputado confesó los hechos en dependencias judiciales. Ese mismo verano, ingresó en prisión provisional por orden judicial.

Ayer por la mañana, el atracador, natural de Asunción (Paraguay), fue excarcelado y trasladado al juzgado de Vía Alemania por parte de la Policía Nacional. Su objetivo era ser expulsado de España. Por ello, se conformó con la condena de cinco años de prisión, una pena que se sustituye por su salida del país durante diez años. El juzgado además ha apreciado la circunstancia agravante de disfraz, ya que el hombre actuó con un pasamontañas.