­Un joven británico de 22 años falleció ayer de madrugada en Magaluf tras caer al vacío desde una altura de dos metros. La víctima cayó de cabeza y murió prácticamente en el acto.

El fatal accidente ocurrió ayer sobre las tres y media de la madrugada en el Hostal Villasol, situado en el número 6 de la calle Llevant de Magaluf. Samuel Peterhill, un joven británico de 22 años, se precipitó desde una altura de dos metros con tan mala fortuna que se golpeó fuertemente la cabeza. La víctima quedó inconsciente, sangrando por la nariz y por un oído. Al percatarse de lo ocurrido, un amigo de Samuel lo trasladó hasta un pasillo cercano para que fuera atendido por los médicos.

Las asistencias sanitarias del Ib-salut se desplazaron hasta el establecimiento hotelero a bordo de una UVI móvil. También se movilizó una ambulancia convencional hasta el hostal de Magaluf donde se había precipitado el joven británico.

Los facultativos practicaron al turista británico maniobras de resucitación cardiopulmonar. Los esfuerzos resultaron vanos. La víctima no respondió a los estímulos en ningún momento y se vieron obligados a certificar su defunción.

Agentes de la Policía Local de Calvià y de la Guardia Civil acudieron al hostal para tratar de averiguar qué era lo que había ocurrido. Finalmente, estos últimos abrieron una investigación pra tratar de esclarecer las circunstancias que rodearon la muerte del joven británico.

La reconstrucción del accidente determinó que, pese a no haberse precipitado desde mucha altura -apenas unos dos metros-, el joven británico sufrió un fuerte traumatismo craneoencefálico que le provocó la muerte casi de inmediato. No obstante, el cuerpo fue trasladado hasta el Instituto Anatómico Forense de Palma para que, en la mañana de hoy, le sea practicada la autopsia.

Esta nueva muerte eleva a ocho el número de fallecimientos ocurridos en Balears al precipitarse desde un establecimiento hotelero o desde un domicilio. Un total de seis personas han fallecido en Mallorca y las otras dos restantes en Eivissa. Además de los fallecimientos, otras ocho personas han sufrido graves lesiones al caer al vacío desde el hotel donde se alojaban.

En Mallorca, Palmanova y, sobre todo, Magaluf acaparan el número de precipitados. En su mayoría se trata de jóvenes turistas británicos. También se han registrado algunos casos similares en la Playa de Palma.

Ante el aluvión de casos de este tipo que se han registrado en Balears en los últimos días, la Policía Nacional ha emitido una serie de recomendaciones a través de las redes sociales para intentar que los turistas tomen más precauciones, eviten conductas de riesgo y no pasen a engrosar la abultada lista de víctimas.