La Policía Nacional detuvo el pasado jueves a un hombre por proferir amenazas de muerte a los funcionarios de la prisión de Palma tras enterarse de que su hermano había fallecido hacía pocas horas en la celda en la que se hallaba interno.

El sospechoso supuestamente también rompió un cristal de una puerta del centro penitenciario tras propinar una fuerte patada. Los agentes le arrestaron por amenazas y daños. Ayer al mediodía, el sospechoso, asistido por el abogado Miquel Àngel Ordinas, quedó en libertad tras prestar declaración en el juzgado de guardia.

Los hechos ocurrieron el jueves por la mañana cuando el hombre se personó en la cárcel de Palma junto con otros familiares, poco después de conocer que su hermano había muerto en la prisión. Según varios testigos, llegó al aparcamiento realizando una brusca maniobra. Luego, rompió un cristal de una patada y supuestamente profirió amenazas, extremo que negó en su declaración.